Paule Ka

Hoy he ido a conocer esta tienda y me ha encantado. Merece la pena entrar (las dependientas son un encanto, aunque no compres te tratarán fenomenal) aunque sólo sea por verla. Todas las tiendas de la firma que hay en el mundo tienen en común el hecho de tener una parte de abajo en blanco y negro y un piso superior en color, en este caso, el verde. Sin embargo, cada una de ellas tiene luego su punto original. En esta, por ejemplo, hay algunas piezas de mobiliario ‘vintage’ restauradas que son una pasada.
Yo he podido ver su «Black Carpet» collection, una colección pensada para lucir en la alfombra roja. Si os digo que las piezas cuestan entre 700 y 4000 euros os parecerán caras pero, pensemos en una boda: por un vestido de fiesta (de los que lucen las madres de los novios, o las hermanas), en cualquier tienda te piden exactamente 700 euros y por uno de novia no pagarás menos de 3000 (pongo el ejemplo de Rosa Clará), así que por ese precio perfectamente puedes encontrar tu vestido de boda o de acompañante sin coincidir (casi seguro) con nadie. Y, ¡al menos merece la pena verla!