Ornela

Ornela es un pequeño bar con sabor italiano donde puedes disfrutar de un vino y una focaccia o un rico provolone!
El trato es muy agradable y son bastante rápidos sirviendo. Los precios son adecuados (2,10 el rueda, 3 el tercio de mahou) y siempre ponen un aperitivo: queso de untar con picos de pan y tostaditas de sobrasada.
El local es pequeño, pero dispone de varias mesas y taburetes en la barra. A media luz, con hilo musical y con su cenicero en la puerta para salir a fumar.

La primera vez que descubrí este sitio, me asombró para bien, ya que entré con unas amigas a tomar una cañita, y salí cenada y requetecenada, ya que es un bar italiano donde te puedes tomar solo unas cañas, o bien acompañarlo de platos italianos, que buenos.
Puedes ir a cenar, ya que tienen mesa para que te sientes tranquilamente, o bien puedes tomar algo en la barra y pedir algún plato.
Aquí vas a encontrar Heineken, pero también las típicas cervezas de Madrid, ya sea caña o botijo. Yo siempre me suelo pedir unos paninis que hacen que están buenísimos, o bien, los tallarines a los cuatro quesos, me encantan, pero de vez en cuando siempre pido otros platos y la verdad es que siempre he acertado, rara es la vez que no me ha gustado un plato.
El precio normal, el restaurante no demasiado grande, por lo que te aconsejo que vayas pronto, los lunes cerrados, así que no lo intentes.

Ornela es un sitio muy acogedor, pequeñito, pero muy interesante. No es caro en relación a la calidad de la comida, por lo menos yo comí bastante bien, además me encantan los italianos y este me pareció muy bueno.
A la entrada hay una barra dónde puedes pedirte unas cañas por un euro con 10 si mal no recuerdo o una copa por 5 euros si vas en plan de tapear. También tienen una gran variedad de cervezas, vinos, infusiones y de chocolates. Vamos, que hay para todos los gustos y está atendido por sus dueños. La señora es muy amable y parece que siempre está contenta.