Tu valoración: 3 San Sebastián de los Reyes, Madrid
Entramos a ver si tenían el cubo de estrella galicia y no tenían esa promoción…nos tomamos una caña y una 1906 red vintage. Nos dieron patatas fritas y después cacahuetes. Atención buena.
Juan D.
Tu valoración: 2 Madrid
«Vamos a desayunar como si tuviéramos 97 años» ha sido la frase con la que he propuesto el Nebraska esta mañana. En este sitio se respira una elevada media de edad entre el público, un alto nivel de precios en su carta, y un bajo nivel de servicio entre el personal. He tenido que repetir tres veces«descafeinado solo» porque parecía resultarles paradójico, y las tortitas están buenas pero, por desgracia, no son las del VIPS(y hay uno justo enfrente). Cuando ha venido la receta ya ha sido la hostia(la que me han dado por estas dos cosas), así que no creo que vuelva mucho porque, aunque la experiencia de estar en sitio acorde a mi edad espiritual debería haberme revitalizado, estoy un poco mayor para que me timen con tan poco salero.
Agathe L.
Tu valoración: 3 Madrid, Espagne
Salon de thé pratique, refait à neuf, bien qu’un peu industriel(en même temps c’est une chaîné). La carte propose de quoi faire une pause tranquille sans se ruiner, dans un quartier très touristique. Le madrileno: une grosse portion de churros et son chocolat crémeux, n’est qu’a 3 euros et vaut le détour(et les calories qui vont avec). Service agréable également.
Juan Pedro P.
Tu valoración: 2 Alcalá de Henares, Madrid
El local en si y los productos no están nada mal. Tienen una amplia carta para desayunos y meriendas, pero el personal que sirve las mesas es muy lento y no hablo sólo de rapidez motriz… La terraza es meramente decorativa porque si el personal es lento dentro, en ésta roza la impaciencia de cualquier persona normal. En resúmen. Si te apetece desayunar o merendar sin ninguna prisa, este puede ser tu lugar, en caso contrario, busca entre los 10.000 establecimientos que hay alrededor.
Natasha S.
Tu valoración: 3 Madrid
Entramos aquí por que veníamos de pasear y mi hermana que esta embarazada y con una dieta especial tenia que comer algo en ese momento, así que a principio de noviembre en su terraza nos sentamos ya que hacia un sol que ningún madrileño se cree, vino la camarera rápidamente, nos tomo nota era muy atenta pero estaba un poco despistada con la carta, por que no tenia muy claro si lo que le pedimos lo podía servir o era solo para los desayunos, después de aclarar esas duda nos atendió, pedimos 3 bebidas y solo un plato la verdad es que el servicio bastante rápido y la cálida del sándwich y las papas frita que lo acompañaban estaban buenas. El local es bastante amplio por, los baños a los que fui están limpios.