Local castizo, cocina tradicional madrileña pero no sólo. También fabada muy buena, … Indicado para platos consistentes(por la tarde, mejor no trabajar). Dejarse aconsejar. De postre, si te ofrecen torrijas, no dudes(como las que hacía mi madre). No es barato pero, en mi opinión, vale mucho la pena.
Antonio J L.
Tu valoración: 4 Granada
Cocina casera honrada y auténtica pero caro. Estilo de ambientación castiza, tapizado de azulejos y fotografías de época –el Madrid de la guerra civil-, a mi no es un estilo que me guste mucho, pero bueno… El trato es estupendo. Ensalada de pimientos del piquillo, fabada, chuletillas de lechal, todo buenísimo bien cocinado y más que apetecible a la vista. De beber buena presencia de Riojas y Riberas.
Ana L.
Tu valoración: 4 Madrid
Este restaurante es uno de los lugares imprescindibles de la gastronomía madrileña, eso sí, hay que ir cuando vienen los padres a visitarte o cuando sin comerlo ni beberlo te llega un dinero con el que no contabas, porque el palo que te meten es de los que duelen. A ver, para ser sincera, es un dinero que se paga con gusto pues la materia prima es de primera calidad y la cocina es de las buenas, buenas… de la de toda la vida y de la que se cocina con amor, porque si no no se explica la exquisitez de sus platos. El ambiente, además es de lo más castizo, así que es un lugar en el que es muy fácil sentirse como pez en el agua.
Carlos H.
Tu valoración: 4 Madrid
Una tasca de las de toda la vida. Aquí no encontrarás superficialidades, sino cocina española al más puro estilo castizo. En cuanto entras se puede observar la decoración con azulejos como antiguamente. Entre las especialidades de la casa puedes encontrar la fabada que la preparan muy buena, también el bacalao o el bonito con tomate, pimientos del piquillo entre otras muchas. Yo he probado las lentejas que ponen los miércoles, así como las judías verdes que ponen a diario. Q tiene de malo? Pues lo de siempre, la receta que te da cuando terminas de comer. No es barato ya que te puede salir la broma por unos 30 € por persona sin enterarte. Lo mejor, la calidad de los productos así como el trato con el cliente, que hace que la gente vuelva y repita.