La alegría, fui con 4 amigos al principio eramos reticentes a entrar por el aspecto del bar pero al final nos decidimos. Una vez dentro después de varias cañas bien tiradas y a 1.30, alegre no era solo el nombre del bar. Las tapas son para un picoteo pero ese chorizo o jamón recién cortado es un acompañante perfecto para la caña!
Hara W.
Tu valoración: 4 Cambridge, MA
If you’re looking for somewhere cheap, delicious, and authentic that isn’t a tourist trap in the area between Calle Gran Via/Puerta del Sol/Palacio Real, then this is your spot. No frills, just delicious, inexpensive tapas and drinks. This is as authentic of an old school bar you’ll find in Madrid, and you’re apt to find locals of the older gentleman variety discussing football and politics in the front room. Order at the bar, there are plenty of tables in the front or back room where your food will be brought, plus some comp olives and bread. Jamon all the way.
Alo Z.
Tu valoración: 4 Madrid
Local ambientado en 1956. Tamaño ridículo. Azulejos de otro siglo, taburetes de otro milenio, cuadros pintados por artistas del pleistoceno. Aroma rancio y antediluviano. Es decir, el ambiente es de jodido 10 si te gustan los bares de viejos. Había leído en varios comentarios lo de que«tiran la Mahou muy bien», y me lo había tomado como la típica frase que se mete de relleno por decir algo positivo, pero q en realidad ni lo notas ni ná. Pues bien, he podido comprobar que no, que la tiran de lujo y se nota muchísimo en el sabor, palabra. De tapas, lo típico, tortilla, aceitunas, patatas. Un tamaño normal, sin grandes alardes, pero sin racanear. El alioli lo hacen con 4 kilos de ajo, está riquísimo. Buena sensación. Repetiré
Raúl P.
Tu valoración: 5 Zaragoza
Este es ELBAR. Siempre que voy a Madrid paso por La Alegría, bar pequeño y acogedor que tiene una tortilla de patata excelente y tiran las cañas como poca gente las sabe ya tirar. Más allá de unas cañas con el pincho de rigor, sus raciones son también muy buenas, callos, lacón… El ambiente y la decoración me maravillan, bar bar, de los de siempre, con unos camareros que no necesitan ser la alegría para servirte bien y salir siempre satisfecho.
Cristina D.
Tu valoración: 4 Madrid
Buscaba un sitio para celebrar mi cumple con lo que para mi es felicidad: cañas bien tiradas, amigos, tortilla de patata y que no fuera muy caro porque me gusta decir lo de «¡ta to pagao!» ;P Y sí, entré en Unilocal y me encontré con esta joyica. Los primeros en llegar empezamos con el vermú(que no es de grifo), porque además el sitio como que te lo pide, y luego ya seguimos con las cañas y los cañones. Confirmado: tiran muy bien las cañas ;) Unos más que otros, porque la noche anterior fue«dura», íbamos teniendo hambre así que pedimos tortilla, lacón y queso. Luego la cosa se fue de madre y empezamos con los boquerones en vinagre y los callos, de los que solo probé la salsa porque nunca me ha agradado mucho su textura. Estaba todo muy rico pero, y quizá fuera yo, el lacón no me terminó de convencer, aunque al resto sí parece que les gustó bastante. El camarero que nos atendió, aunque a veces andaba un poco por su planeta, fue muy amable y nos organizó una mesa perfecta según llegamos y al ir a pagarle me dijo: bebéis más que coméis, a lo que le contesté: no conozco de nada a esta gente ;P
Leon M.
Tu valoración: 5 Madrid
El Bar La Alegría es un sitio fantástico, una tasca de verdad en pleno centro donde se respira ambiente de bar y al momento de entrar estás tan a gusto como si fuese tu bar de toda la vida. Lo he descubierto hace poco y estoy contentísimo, el trato es muy bueno y es uno de los pocos sitios donde recientemente me han invitado a una caña después de tomar cinco o seis seguidas, sana costumbre que casi se ha perdido por completo en la capital. La tortilla y el lacón casero son una maravilla.
Lolo R.
Tu valoración: 4 Madrid
Taberna de esas de las de siempre, de las de toda la vida, de las que cuando entras con un guiri mira de reojo el suelo y piensa«¿es que en este país no se han inventado las papeleras?». Pues sí, se han inventado, pero no hay costumbre más madrileña que tirar el palillo y la servilleta al suelo del bar. La costumbre se va perdiendo, es un poco una cerdada y yo creo que las nuevas generaciones vamos teniendo más conciencia de eso de buscar un sitio donde lanzar nuestros desperdicios, pero en sitios como este sigue viva como la que más. Camareros atentos(sin demasiadas florituras, pero atentos), cerveza bien tirada, tortilla rica, rica, rica y un cuarto de baño que haría las delicias de cualquiera de los guionistas de REC. ¿Qué más se puede pedir?
Juan D.
Tu valoración: 4 Madrid
Nada mas ver su bonita fachada parece que te has trasladado a los años 50, por dentro parece que nada ha cambiado desde hace décadas. Ir a La Alegría a tomar una cerveza con su riquísima tortilla es una delicia.
Elena M.
Tu valoración: 4 Madrid
Lo descubrí porque una persona me habló de él y lo elegí para celebrar mi cumpleaños. Un sitio estupendo para tomarte unas cañas, bien tiradas, por un barrio en el que abundan los bares cutres y los bares que te timan. Sin lugar a dudas, es un placer sentarse en un viejo banquito de madera y contemplar esas baldosas antiguas mientras tus acompañantes y tú no dejáis nada en los platos que acompañan a esas cañas. Para los amantes de la tortilla es un sitio que apuntar en su libreta de direcciones
Francisco R.
Tu valoración: 4 Madrid
Alfombra de serrín si llueve, peleas de zapatos con los palillos, con huesos de aceitunas, pataditas a las servilletas con lamparones y una de las mejores tortillas que he probado en Madrid –y van unas cuantas ya-. Es un sitio en el que me siento cómodo a pesar de los banquitos de tablas finas; será por el azulejerío de las paredes que me gusta y me entretiene; será por los precios ajustados y las tapas bien servidas. Ellos mismos preparan su lacón, el camarero nos lo explicó en cierta ocasión en la que yo, monger de profesión y nacimiento en lugar de estar callado y degustar el lacón tal y como me lo habían servido voy y le pido que le eche aceite y pimentón. ¿Qué pasó? Pues que el camarero no se negó y me explicó que ese es un truco para disimilar lo insípido del lacón que ponen en otros locales. Aquí, repito, lo hace ellos. Cocinan el lacón en sus cazuelas enormes, lo meten en salmuera, lo dejan reposar, lo sirven desnudo –el lacón, no el camarero– y realmente se disfruta del sabor de un lacón prearado a lo tradicional. Además, nos explicó que a algunos clientes, ciertas vetas irisadas-azuladas que le aparecen al lacón más bien les echan para atrás PERO están equivocados. Precisamente esas vetas, en su punto justo, son las que le confieren el punto exacto de sabor y equilibrio de curación en salmuera. Así que, si cuando quiero morir con una tortilla equilibrada –crujiente por fuera, algo líquida por dentro– y un lacón excelso a La Alegría me dirijo. De beber, clara, con más limón que cerveza por favor. Mas que anda por la cantidad que voy a ingerir. Gracias. Además, es barato.
Daniel H.
Tu valoración: 4 Madrid
Típico bar de la calle de las Veneras al que alguna vez vamos cuando ya llevamos un rato en El Labriego que es nuestro favorito. No hay mucho misterio en el: cañas baratas, tapas en crecimiento exponencial si vas sumando cantidad de consumiciones, jóvenes entremezclados con los parroquianos de toda la vida, palillos y servilletas en el suelo, riego a partirte la crisma con las pepitas de aceitunas… En resumen otro más(y son bastantes por la zona) de los bares recomendables para cañear por el centro. Olvídate de Lizarranes y demás, por el amor de dios…
Iker B.
Tu valoración: 5 Madrid
Cuesta hablar del bar favorito de uno, entre otras cosas por el tema del secretismo, de no compartir un rincón, un lugar. Pensar que alguien, al leerme, inducido por lo que yo escribo ahora, puede ir allí y tomar, como yo tomo, la cerveza bien tirada, una de las mejores tortillas de Madrid, un lacón que los propios camameros(y supongo que dueños) preparan, mientras, esquinado en el mismo banco donde yo me esquino, mira las mismas baldosas que yo miro y piensa en lo mismo que yo pienso(en el carácter demoniaco de todas las cosas plegables, en la nostalgia que me causa que mi madre no vaya a calzarme de nuevo unos patucos o en la luz de ese día y en cómo incide en una esquina o destaca una zona de la calva del viejo que, afuera, apoyado en la puerta, fuma) me repele. Tú, perverso suplantador que ahora me lees, olvídate de esto y lárgate al maldito McDonadls.
Nuria G.
Tu valoración: 4 Madrid
Probablemente este sea el bar en el que más cañas y aceitunas he tomado de todo Madrid. Lo conocí en mi primer año en la capital, ya que está situado en una zona muy céntrica y me gustó tanto que desde entonces siempre que ando por la zona acabó allí. El local es de lo más cañí. La típica tasca madrileña de toda la vida con azulejos por las paredes y bancos de madera. Los camareros son más majetes de lo que viene siendo habitual en este tipo de bares, pero vamos, que tampoco es que derrochen simpatía a raudales. Las cañas están a buen precio y con cada ronda te sacan un nuevo pincho. Con la primera van una aceitunas de Campo Real que están de muerte, con la segunda la tortilla, con la tercera el embutido, etc. Siempre recordaré este bar con cariño por ser el lugar donde descubrí las aceitunas de Campo Real que se han vuelto indispensables en mi nevera! Y he de decir que las que tienen en La Alegria son de las más ricas que he podido probar hasta el momento.