Javier Martín Croquetas & Café

Llevaba media vida oyendo hablar de este lugar. Y no solo eso, sino también viendo las fotos que había por aquí, sus anuncios en el Metro… TODO, en general. Así que el otro día, mientras daba un paseíllo por el Rastro, cuando un amigo me dijo de ir a tomar una caña pensé «pues vayamos aquí, ¿no?». Y aquí nos plantamos.
La verdad es que me esperaba el lugar sensiblemente más grande, pero no. Es bastante chiquito. La zona del bar tiene bastantes mesas, y una barra, más unas escaleras para bajar al baño… Está todo bastante lleno de cosas, la verdad. Luego hay una portezuela que da al restaurante, pero (los domingos al menos) solo te puedes sentar si pides un plato por persona.
Pero vayamos al lío: nos sentamos y pedimos dos cervezas y una ración de croquetas. Las cervezas son dobles, sin derecho a réplica. Pero están bien tiradas, y muy muy frías; y encima es Mahou Clásica, que es la que a mí me gusta. Luego pedimos una ración de seis croquetas, por algo más de 4 €. En esta ración puedes elegir dos sabores, nosotros elegimos bacon y morcilla.
Tengo que reconocer que estaban muy, muy pero que muy buenas. Te encuentras bien de tropezón, y son de un sabor espectacular. Hay algunos sabores bastante arriesgados (y yo tengo que reconocer que soy de croqueta tradicional) pero bueno, se acepta. Eso sí, la gráfica y el aspecto del local no están muy muy cuidados. No en tanto que esté sucio (que no) sino que tiende al feísmo. ¿Pero a quién demonios le importa eso cuando se come una croqueta que está buena?
A NADIE.

Buenas, para mi gusto muy grasosas, pero excelentes para acompañar una cerveza con los amigos.

Rico rico. Raciones de buenas croquetas a un precio justo, nada de croquetas congeladas a diez euros, por dios! Está rica la masa está rico el rebozado, te las fríen al momento, te las sacan rápido, hay mucha veriedad. En fin. Es un bar que vende lo que vende y no engaña. Cumple con las expectativas. No le pongo cinco estrellas por las camareras, que casi nos hacen un placaje cuando pasamos de estar en la barra a salir a la terraza con las cervezas, y fue bastante poco correcta. Pero salvo ese hecho puntual todo ok.

¿Croqueteas? Pues te voy a contar de que va este sitio:
Básicamente el funcionamiento es sencillo, unes una tasca cutre de toda la vida con las croquetas de tu abuela y una pizca de originalidad y ¡BOOOOM! tienes este fantástico lugar en el que si te despistas hasta te rebozan en la bebida.
Tienes un quintal de croquetas distribuidas entre croquetas saladas: que van desde las típicas croquetas de jamón, gambas, boletus, queso… hasta creaciones nuevas como morcilla con almendras; y también croquetas dulces… un momento ¿DULCES? SI, dulces, y están increíbles. No se como narices lo hacen para hacer una croqueta de dulce de leche y que encima te den ganas de repetir de lo rica que está.
También tienes croquetas de frutas, así que no tienes excusa para no cumplir lo de «5 piezas de fruta al día».
A parte de esas maravillosas bolas fritas, cuentan las malas lenguas que sirven otras cosas como desayunos y comidas pero creo que es la típica leyenda de barrio. Yo cuando entro allí solo tengo ojos para esas bellezas doradas y brillantes.
Un plus, tiene WIFI, así que a la vez degustas una de sus croquetas también te da la oportunidad de que pruebes si realmente la pantalla de tu móvil es oleofóbica.
Voy de vez en cuando, sobretodo cuando alguien no lo conoce.
PROS: Aquí tienes croquetas que tus ojos jamás han visto, que tu estómago jamás ha digerido y que… tienen Wifi gratis.
CONTRAS: Es posible que sufras de una enfermedad llamada EMPACHO porque no vas a parar de probar croquetas.

Las croquetas están muy buenas, pero no muero de amor por el resto de las tapas, está bien por la experiencia y por la curiosidad, pues hasta hay croquetas de arroz con leche!

Fan inconditionnelle des croquetas Espagnoles j’ai cherché sur Unilocal les avis des locaux en termes de Croquetas. De profil Elite en profils j’ai trouvé cette adresse, à proximité du Métro de La Latina.
Dans l’avis, on pouvait lire que ce restaurants /​bar à Tapas proposait non moins de 32 variétés de croquetas, il né m’en a pas fallu plus !
Une fois sur place j’ai été surpris par la taille de ce bar à Tapas, pas plus de 16 couverts. Nous étions trois et nous avons eu la chance d’avoir la dernière table de libre (Au fur et à mesure que nous mangions, une bonne quinzaine de personnes sont arrivées dans ce lieu plutôt petit et commandé au bar ou sur mange debout).
Les serveuses, très sympathiques sont venues à nous très vite. Nous avons alors commandé deux assiettes de 6 croquetas de Champignons et jambon et de Bacon. Parmi les saveurs proposées il y avait en autres: roquefort, saumon, jambon ibérique, jambon fromage, tomate et fromage, anchois et mêmes des saveurs sucrées: chocolat blanc, chocolat noir…).
Les 6 croquetas né vous couteront que 4,95 € avec possibilité de mixer 3 croquetas d’une saveur et 3 autres d’une autre. De même, pour les gourmants, des croquetas énormes appelées «Croqueton» pourront vous être servis (attention toutefois, les croquetas ont tendance à refroidir vite).
L’on commande les boissons et recevons en plus de la bière demandée une assiettes de patatas fritas :).
Bref nous avons attendu un petit quart d’heure et enfin, elles étaient là !
Les saveurs étaient au rendez vous, de vraies croquetas espagnoles ! Les 12 croquetas ont suffi à nous nourrir tous les trois ce qui en fait un lieu à très bon rapport qualité/​quantité/​prix.
J’y retournerais surement cette semaine pour y goûter d’autres saveurs !

Estuve en esta croqueteria/​cafeteria el año pasado, está situada cerca de una de las famosas discotecas de Madrid (en el barrio La Latina) y realmente es el paraíso de la croqueta, puedes comer todo tipo de croqueta tanto dulce como salada y si llevas prisa te las puedes comprar sin freír y te las puedes cocer en casa. Aquí hay diferentes ofertas por ejemplo si tomas una copa de Mahou te regalan una croqueta gratis a elegir Creo que esta croquetería será para mí un motivo más para volver a Madrid visto que la croqueta española es mi tapa favorita… comeria cientos de croquetas cada día jajajajaja. El propietario está de un simpatico.

De este sitio solo diré que ponen unas croquetas espectaculares en tamaño y calidad.
Por 5 euros te llevas 6 croquetones (puedes elegir dos sabores por ración de 6). He probado ya 6 o 7 variedades y todavía quiero ir más veces para seguir probando más, eso si, todavía nunca me he atrevido con las dulces porque me dijeron unos colegas que no estaban demasiado bien.
Nos quedamos con ganas de probar la croqueta gigante que es para compartir pero ya no les quedaban, por suerte, esto significa que tendremos que repetir de nuevo

Tienen una publicidad en el Metro de que son las mejores croquetas de Madrid. Y pues no me resistí a ir y me han convencido! Tienen 32 sabores de croquetas. Las que más me han gustado hasta ahora: las de espinacas! Una delicia!!!

Excelente sitio para comer una de las mejores croquetas de madrid, os lo juro. Esta increíble. Es el típico bar español pero con una comida muy rica.

Buenas relación calidad-​precio en las raciones de croquetas que ofrecen. Tienen más de 30 diferentes. Probamos las de bacon y bonito y estaban ricas. Además, tienen terraza, aunque muy cerca de donde pasan los coches.

Mañometro: Ni fu ni fa, ni chicha ni limoná
No, no, no demasiado bien … recuerdo que cuando llegue a Madrid un compañero de trabajo exclamó, «el día que vayas por este local te darán vueltas las orejas a la primera croqueta» y puesto que nos invitaba a cenar por su cumpleaños me dije, es tu momento y una gran oportunidad, me pondré mis mejores galas y prepararé mis orejas.
Poco sabía yo que me llevaría una pequeña decepción, o un chasco como dirian en mi tierra, y eso que soy un tío muy conformado y engullo prácticamente cualquier vianda, sin embargo, tengo una vena talibán-​gourmet con dos productos de la gastronomía española, las croquetas y la tortilla de patata, y ahí amigo mío no me la pegas … si bien hay que reconocerle el merito de tener tan amplia variedad, el sabor genérico a bechamel que tenían absolutamente todas las variedades le quita todo el mérito.
Ojo clavel, es un lugar «fantastic» para llevarte una croqueteision a la boca, pero las orejas se quedaron en su sitio casi toda la velada.

Al principio por mi prejuiciosa forma de ser, había desechado este bar: terraza incómoda, interior nada del otro mundo, etc., pero cada vez que pasaba al lado veía que tenía un cierto éxito. Un éxito llamado carta de croquetas.
Ya he estado unas pocas veces y sólo puedo decir que todas las croquetas que he comido, bacalao, champiñón y jamón, etc., estaban muy buenas.
ahora le han puesto una especie de mampara de metacrilato para separar un poco la terraza de los carriles infernales de tráfico de la calle Toledo, que al menos quitan un poco el airazo achicharrador y el humo de los autobuses de la EMT.
De precio no está disparatao y las camareras de la terraza son majetas, dentro no he estado nunca!

Para un croquetero empedernido como yo el hecho de no haber visitado este templo de la masa rebozada bien pudiera suponer un retraso en la consecución de mi título de Maestro catador Croquetil… pero lo dejo pasar porque hay varios y muy buenos lugares en los que disfrutar de una tapa tan española y tan buena como esta en la que se especializa Javier Marín.
Aquí hay una inmensa barbaridad de croquetas variadas, con una terraza en plena calle Toledo (lástima del tráfico y sus malos humos) en su intersección con la parte Oeste del Rastro (apunte de Rastrero orgulloso), en una zona tradicionalmente madrileña, con muy majos camareros.
Me quedo, de momento, con la croqueta Lluvia de Uva… vendrán más. Un sitio para tener en el radar.

Para los adictos a las croquetas, es una visita obligada que os recomiendo hacer. Y a los que no seáis tan fanáticos, no os preocupéis porque tienen diferentes platos para ofreceros. Aunque dudo mucho que con la cantidad de croquetas diferentes que hacen, no haya ninguna que os llame la atención.
Yo hablaré desde mi propia experiencia. las croquetas de aquí son brutales. y tienen una variedad increíble.sabores que nunca hubieras pensado juntar y que se funden en tu boca al saborearlas. Cualquier combinación que te puedas inventar está ahí.ya que su especialidad son las croquetas como todo el mundo sabe.
El servicio fue muy agradable y recuerdo que fue una comida muy agradable entre cañas y croquetas. Tiene unos precios bastante asequibles y te quedas perfecto. Además te dan la opción de elegir dos sabores si te pillas la bandeja de 6 croquetas.
Y para los que les apetezca algo dulce. como no​.la croqueta de chocolate blanco mmmmmm :) aunque también tienen de chocolate negro y creo recordar de dulce de leche.

When i was last year in Spain, my friends took me to this place. The croquetas are so fresh! Following the mom’s recipe for croquetas this place is a must when you are in Madrid and around La Latina neighborhood. 6 croquetas for 4.60 euros, not bad at all!
Try the finas hierbas, is to die for!

Un clásico para los amantes de las croquetas. Es el paraíso de las mismas con una cantidad y variedad que asombra. El bar está divido en dos, la parte de bar dónde puede tomar una caña, o una copa y pedir para llevar o comer algo en las mesas de la zona y luego otra parte de salón comedor que en fines de semana suele ser complicado encontrar sitio puesto que muchos grupos de chavales comen raciones mientras toman algo antes de salir. Pero también tienen carta de menú, aunque lo distintivo sean las croquetas.
Entre las variedades más extrañas están algunas tan poco comunes como Arroz con Leche, melocotón o Kiwi, pero algunas como las de Bacalao, Salmón o Roquefort. Buenísimas.

Este Restaurante se puede incluir en unas cuantas categorías. Parece que quieren abarcar unos cuantos campos, Restaurante, Croquetería, Cervecería y Heladería. Si señor, ¡ con un par! A mi me encanta este sitio, por variedad que no quede. Puedes probar las 32 croquetas diferentes que tienen, tomarte un helado, un café, lo que te de la gana.
Las tapas son fantásticas, me encantan los vasos en los que te ponen las tapas también.
Te recomiendo las croquetas y los bocatas.
Ya era hora de que hubiera una croquetería profesionalizada como esta, que por tener las tiene hasta de plátano.
Uno de los mejores de la zona, es informal, está bastante limpio, es agradable, el público es diverso.
Yo creo que deberían hablar con El bulli para seguir investigando e innovado en el mundo de la croqueta. Podían hacerlas de diseño.
Vaya idea que tuvo Javier Martín.
Cuando tengo que enseñar Madrid a algún amigo, que viene de visita, suelo pasar por aquí para presumir de generosidad y peculiaridad, olé!

Espero que el pan rallado con el que rebozan las croquetas sea polvo de oro, por que si no no entiendo que te cueste un euro la unidad. Bueno, entiendo que cueste pensar en 32 sabores distintos, incluidas las croquetas dulces, pero no resulta muy asequible si no te pides alguna de las ofertas.
Y por desgracia el ser humano cuando ve tanto, lo quiere todo y o pruebas una y te alimentas del recuerdo, o te lanzas a pedir y se te cae el presupuesto.
No seré yo quien diga que hay una mala, por que las que probé estaban buenísimas y diré más: mejor que las de mi madre, pero al final no te acaba compensando.

Mundialmente conocido como «el de las croquetas». Se trata de un bar en el que entras seducido por los fluorescentes verdes que te atraen repulsivamente como un canto de sirena. Por dentro está decorado al más puro estilo americano, pero con un ambiente demasiado castizo como para trasladarte a Chicago.
En todos los bares del mundo están el camarero bueno y el camarero malo (tipo poli bueno-​poli malo), pero creedme cuando digo que en este bar sólo hay camareros buenos. Es imposible no entablar conversación con ellos ni dejar de soltar o escuchar algún chascarrillo, todo un placer, la verdad.
En el menú puedes encontrar desde bocadillos a crepes, pasando por platos combinados, pero, sin lugar a dudas, el plato estrella son las croquetas. treinta y dos variedades distintas que abarcan todos los gustos posibles: dulces, saladas y hasta de frutas…
Advertencias, las croquetas de chocolate saben a chocolate con churros y el bikini (mixto con huevo) se srve con rodajas de tomate natural.