Irish Rover

The best Irish joint in madrid, if not spain. Really laid back, except big match days, have all the global sports teams and games, great bar food too. The decorations are awesome as well. But for me it is a great place to have beer w friends. Well done.

Perfecto para poder tomar pintas de marcas irlandesas, pero me parece un tanto caro que te cobren 5,50 € por una pinta de cerveza con un bol de patatas… El servicio es majo, aunque a veces tardan un poco en atender.

Ya había estado aquí varias veces y también recuerdo con cariño la vez que hicimos el evento de Unilocal :)
El otro día fui con unos amigos a tomar unas cervezas, estaba bastante lleno y nos quedamos en la semi terraza de la entrada, digo semi porque es acristalada y en verano queda abierta. Arriba había una fiesta privada y el resto de mesas estaban bastante llenas. Este sitio siempre está muy frecuentado por yupis, extranjeros y gente que pica algo antes de entrar a la Moby!
Nos pedimos algo de beber y mis colegas se pidieron una de nachos y yo, que no los podía tomar me pedí un hot dog que tenía un precio razonable y me apetecía. ¡MADRE MÍA! Creo que fueron a buscar la salchicha al propio Frankfurt porque tardaron siglos!!! Un insignificante perrito, que no es otra cosa que un poco de pan con una salchicha y unas patatas. He visto sitios en los que despachan millones de hot dogs en un segundo. Que tampoco estamos hablando de el hot dog de tu vida. Cuando se lo reclamamos la tía nos dijo que estaban con él, no se si refería matando al cerdo y haciendo la salchicha en el momento. Eos sí de os nachos se había olvidado por completo, nos dijo que no se lo habíamos pedido.
Finalmente nos lo trajeron y bueno, estaba bien. Solucionó mi tremenda hambre pero sin más. Así que puede que si venís os recomiendo tener paciencia. No quiero ni pensar lo que pasará un fin de semana. Era un jueves a las 11 de la noche.

Sin duda uno de mis «irlandeses» preferidos. Tal vez porque trabajé durante años en esa zona, incluso en el mismo edificio Iberia Mart y me recuerda a cuando los compañeros nos tomábamos unas pintas al acabar el curro los jueves.
Siempre me ha gustado su look y su nueva terraza veraniega está muy chula, la verdad.
Su nueva carta, con varios tipos de cócteles y comida también tiene buena pinta, aunque yo prefiero eso, una buena pinta de Guinness o Smithwick’s.

Tengo que confesar que siempre me gustó este sitio, a pesar de lo pretencioso de su planteamiento y su decoración, y a pesar también de lo absolutamente desagradables que eran los «puertas», pero… Ay, amigos, lo han convertido en una suerte de lounge tremendamente raro, conservando parte de la decoración antigua y patinando estrepitosamente con la mezcla. Es caro, vas a tomar una cerveza o un whiskey y sales oliendo a fritanga por los cuatro gatos que piden alguno de sus infumables y caros platillos. Por si esto fuera poco, los camareros son bordes y perdonavidas… Vamos, una delicia de garito, sobre todo teniendo en cuenta que en un café, un scotch y un gintonic me gasté lo mismo que en una cena –moderada– para tres. Lo recomendaría como lugar donde traer a tus primos de un pueblo perdido de la mano de dios, para que vean lo que se puede hacer con madera y con algo de (bastante) morro.

Ya había estado en alguna ocasión anterior y tenía ganas de volver. Con la excusa de un partido del Atleti, reservamos mesa y fuimos para allá.
Me decepcionó. Nada más llegar, nos tuvieron un rato esperando mientras hablaban entre ellos hasta que, por fin, nos llevaron a nuestra mesa, en un buen sitio frente a la pantalla gigante. Pedimos un par de pintas y unos nachos que no resultaron nada del otro mundo. A continuación, pedimos un par de hamburguesas que nos costó acabar por lo secas que estaban. No sabían a nada, sólo a carne y pan, el resto de ingredientes estaban desaparecidos.
Quizás influyó que el bar estaba hasta arriba de gente, pero yo lo recordaba de mejor calidad. La decoración me encantó, eso lo admito, y el ambiente es muy bueno. Volveremos en otro momento más tranquilo, a ver si así puedo subirle la valoración.

Estuve cenando aquí con unos amigos y he de decir que no salí disconforme pero si con un poco de sabor agridulce.
La comida estaba buena, no hubo queja, tomamos unas hamburguesas y debo reconocer que cumplían. El local bueno, pues el local es genial, que decir, es el p… Irish Rover… Pero el servicio… creo que aún no han pasado página y siguen tratando a los clientes como cuando era una taberna-​bar de copas una hora desde que nos sentaron (habiamos reservado con antelación) hasta que nos dieron las cartas… lo que se lee…, además el ambiente no acompañaba, ya que el ruido era excesivo.
No obstante seguiré de cerca su evolución.

Es muy grande, siempre hay ambiente y te ponen todos los partidos. Por lo tanto bien. Pero tampoco nada del otro mundo. Para ver el partido o empezar la noche si vas por Avenida Brasil y Bernabeu de marcha.
Pd: eso si, comparado con los irlandeses de la zona de Sol (salvo el O’Neills), es una maravilla

Para mi es uno de los mejores pub de estilo irlandés que hay en Madrid. Pero aparte de la cerveza, que suelo pedir una pinta de Guinness, siempre me he decantado por los nachos con queso y pollo. Aquí descubrí la cerveza Desperados, jeje… con un puntito de tequila!
Los conciertos en directo también le dan un punto a favor, aunque cada vez haya mas locales que lo hacen, sin embargo el Irish ha sido bastante adelantado en esto de la música en vivo.

Casi todo el mundo que conozco y ha visitado este local dice que es de lo mejor que hay en Madrid. Es uno de los pocos irlandeses que hay por la capital, es amplio (enorme en realidad), tiene comida barata, etc. Muy atractivo.
He de reconocer que la ambientación es increíble, con una calle inglesa reconstruida en la planta baja, un rincón que imita una biblioteca en la alta, una escalera de madera, un pequeño escenario… De todo. Para mi gusto es un poco ruidoso, no por la música, sino por la acústica, que hace que aun cuando hay poca gente se note un barullo considerable.
Lo malo es que todo eso no deja ver que la comida es de calidad media/​baja, muy grasienta, basada en platos fáciles de entrar, como las alitas, pero de escasa calidad.
Un buen sitio por la zona de Tetuán /​Bernabeu, barato, abierto hasta tarde y acogedor, si lo que buscas es compañía y ambiente y no una cena de gran calidad.

Siempre me ha gustado mucho el Irish, y la verdad es que el nuevo lavado de cara que le han dado me parece un acierto total. Siguiendo la estela de los locales más malasañeros, pero enclavado casi frente al Bernabéu, en una zona que no está tan acostumbrada a estas cosas, el Irish se ha atrevido con decoraciones de madera, estilo vintage y sillas de su padre y de su madre, amén de con algunos cambios en su interior, que lo hacen más apetecible en su modo restaurante.
Recalco lo del modo restaurante porque, si bien el Irish se mantiene como pub irlandés, su carta de comida ha pasado a adquirir muchísima importancia. Mejillones estilo belga, deliciosos, unas ensaladas fresquísimas, tosta de roast beef (que siempre es una delicia comer) y sobre todo el que posiblemente sea el mejor fish and chips de Madrid. ¡Imprescindibles para los amantes de la comida con sabor a Union Jack!
Por supuesto, siguen contando con hamburguesas, pantallas de televisión en las que se pueden ver los deportes más inusitados y, como estrella de la corona, una terraza frontal que es desde ya un «the place to be» para los afterworks madrileños.

Me gustó mucho el día de San Patricio la fiesta, la primera vez que fui, el ambiente super animado. Volví a ir en un día normal y también me gustó. Lo que sirven en la carta está muy rico, las alitas… mmm y bueno qué decir me encanta la Bulmers y allí la sirven y bien fresquita.
Un buen sitio para ir y pasar el rato con los colegas tomando bebidas bien frías y comiendo alitas, raciones y hamburguesas jajajjaa

La verdad es que nunca pensé que un irlandés fuera el mejor sitio para celebrar un cumpleaños… de una niña de 2 años. Tienen un menú infantil especial para cumples con bebida por 5,50 €. Hay animadora o puedes llevarla tú a parte. Hacen muchas actividades infantiles muy chulas con los peques. Y también tienen precios especiales para los adultos. Hay que pensar que donde viene un niño suelen venir dos adultos a los que hay que contentar también. Pues con sus impresionantes alitas, nachos y minihamburguesas lo tienes listo. Los camareros muy simpáticos. Nos habilitaron una zona privada para el cumple, al final fuimos 8 niños y unos 20 adultos. Lo único malo es que donde estuvimos no había mucha luz. Pero tienen un patio exterior que en época de menos calor es fantástico para que los niños corran a sus anchas.
Si se puede compaginar una buena Guinness para un adulto con unos nuggets para los peques.

Irlandés de referencia en la zona. Hay otros, pero son más pequeños y de ambiente distinto. Supongo que por la zona en la que se encuentra, Avenida de Brasil, es un buen lugar para salir de fiesta tranquilamente, pero evitando los antros de mala muerte y peor música de alrededor. Se salva la Moby Dick. Y ese suele ser mi siguiente paso en caso de querer más jaleo. Aunque el Irish lo tiene.
Y como no sólo somos aves nocturnas, es un buen sitio para ver partidos de fútbol (liga groenlandesa incluida) y de deportes raros de estos que acostumbran a ver los ingleses, alemanes, etc. Y supongo que de ahí viene la afluencia de extranjeros al sitio, infintimanete mayor que al resto de «irlandeses» cercanos.
El precio de las pintas es ajustado. 5 euros la Murphys, Guiness y Heineken y 5,5 la Paulaner de trigo. Y ahí es dónde falla un poco. No pido 100 grifos de cerveza, pero un poco más de variedad, amosaver… Que teneís el sota, caballo y rey de las cervezas. Que poco costaría tener un grifo que vaya cambiando, dónde se ponga por un tiempo una cerveza nueva o diferente.
El veranos pasado había una buena oferta de hamburguesa y pinta por 10 euros, si no recuerdo mal y desconozco si siguen teniéndolo Pero, siempre tienen alguna oferta de comida y bebida.
Y hasta aquí el comentario número 100 del que escribe. Ale

Puede que sea demasiado atrevido lo que voy a decir pero el Irish Rover es, para mí, el mejor irlandés de todo Madrid. Me enamoré definitivamente de él cuando fui a ver la final de la Heineken Cup de rugby con un amigo y nos pedimos una oferta cada uno de una hamburguesa, una pinta de Paulaner y un cubata por 15 €. A las cuatro de la tarde.
Es enorme. Tiene dos plantas amplísimas, con multitud de mesas en las que sentarte, y en la planta de arriba tiene una biblioteca aislada del resto del bar en la que meterte a leer a Poe y debatir sobre Schopenhauer.
El servicio es joven y dinámico, siempre intentando agradar, y hablando varios idiomas, ya que por las noches se suele llenar de extranjeros, lo que le convierte en el sitio perfecto para ir a practicar idiomas.
También es idóneo para ver cualquier tipo de evento deportivo, ya que tiene pantallas repartidas por todo el bar, y en su página de Facebook se puede consultar la programación de los eventos que van a retransmitir.
Los precios, a pesar de lo que se pueda creer, no son nada caros, y se puede cenar e implarte de cerveza por un módico precio. Además, tiene la sala Lemon y la Moby Dick al lado, por lo que es el sitio perfecto para comenzar una noche de fiesta por la Avenida de Brasil.
Recomendadísimo.

Había estado alguna vez en mis tiempos mozos y ni siquiera me acuerdo bien de la velada (ya se sabe que la Avenida de Brasil es peligrosa…) pero un amigo que vive al lado me habló de sus hamburguesas y ya no podía dejar de pensar en este pub irlandés.
Así que un día cualquiera nos plantamos a mediodía por allí y descubrí un nuevo The Irish Rover: luminoso, espacioso y con olor a comida rica.
Tienen un menú del día interesante por 10,50 €, en el que puedes modificar el segundo plato por una hamburguesa por un euro más, así como otras ofertas los días de partido y los lunes porque de precio vamos más que apañados.
Nosotros tiramos directamente por dos hamburguesas: la BBQ Philly y la Irish Rover que no son ni de lejos las mejores que he probado pero que hacían digno nombre a su denominación hamburguesera. La carne estaba rica y el resto de ingredientes también, aunque el pan es regulero.
No sé si es porque tenía hambre o porque si ya me estoy imaginando un díà la velada hamburguesera junto a una pinta y una visita posterior al vecino Moby Dick pero ¡estoy deseando volver!

Es probablemente junto con el O’neills uno de los mejores pubs irlandeses de Madrid.
La decoración tipica, estandarizada y extendida de pubs irlandeses que asolan Madrid, es decir, ambiente relajado, luz tenue que resalta la belleza de los menos agraciados, madera en las paredes, mucho verde, teles por todas partes, murphys y guinness de grifo más alguna otra cerveza y ganchos para la ropa en las paredes (inventaco que se echa de menos en bares patrios que uno no sabe donde colocar el abrigo).
A parte de eso, es bastante grande. Tiene dos plantas, la primera más de restaurante, mesas y sillas para comer, y la segunda con un poco de todo: una zona de libreria sin ruido para charlar (yo nunca entro ahí) y otra más amplia para tomar una birra a 5 € la pinta y charlar a gritos con luz tenue, arrimando un poco más de cebolla al contertulio para que te vea. En esta 2ª planta también estan los baños, importante que la cerveza es diuretica, que a la par que desahogas la vejiga puedes ver el calendario de partidos de futbol y rugby que televisan. Con la dichosa ley antitabaco, que nos priva de libertad a todos los españoles, han habilitado la terraza (colindante con la del Moby Dick) para fumar con setas de calor. Una solución también muy irlandesa-​escocesa.
Destaca sobre el resto de pubs pseudo irlandeses, además de la amplitud y servicios, la calidad de su cocina. Destacar sobre los ignacios con queso, la hamburguesa. Por unos 10,50 € (hablo de memoria) tienes una muy buena pero que muy buena hamburguesa de bacon con queso, con patatas y una pinta de lo que tú elijas.
Definitivamente, me gusta mucho este irlandes. Por su variedad de servicios, por su cercanía al Bernabeú, su ubicación, su cerveza.

Probablemente una de las dos mejores hamburguesas de Madrid. No es la típica hamburguesería de moda, y eso es lo bueno. Servidas con patatas fritas y un poco de ensalada, la carne de estas hamburguesas es sencillamente espectaculares.

Y regresando al mundo Unilocal,he de decir que lo que necesitaba era un lugar que me volviese a «inspirar» (además de salir de un par de crisis existenciales…) y pues así las cosas, donde menos te lo esperas, el destino te sorprende. Eso ha sido el Irish Rover para mí: volver a la vida, ver las cosas buenas, los amigos, la alegría de la compañía, la buena comida, el ambiente inmejorable, la música perfecta… Todo conjuntándose para hacerte pasar una de esas noches para recordar.
Vale mucho la pena. De entrada lo que sorprende es la decoración, que de verdad te lleva a una plaza de Dublín (con mi poca experiencia del país verde). La comida es buena y sustanciosa para ese tipo de galanes que no nos conformarnos con sólo huesos ;-). Las cervezas de todo tipo, nacionales e importadas, así que si mueres de ganas por una Guinness o una Paulaner… Aquí es el lugar!!. Pero creo que habrá sido el ambiente y la combinación de música y comida lo que sugestiona una experiencia casi orgásmica… :-)~!!
Que por qué no las cinco estrellas? Un pequeño detalle: el servicio. Nada malo, pero lento. Tal vez mala suerte de la noche. Así que nada.
Así que seguro un lugar para volver, y ¿por qué no? Tal vez la próxima reseña será de 5 estrellas.

The Irish Rover Pub is a blast! My girlfriend and I stopped by here after dinner a few weeks ago just to get our night started and take some shots. I generally love Irish pubs and thought this place was so much fun!
We got a few rounds of shots and well drinks and enjoyed the live music. There’s a ton of seating comfy chairs and couches included and you can have good conversation here too. The live music was so fun and they play a variety of well-​known songs.
It’s not a place to stay at the whole night in my opinion but such a great place to start out and get nice drinks.

Conocía el Irish Rover y la espectacularidad de su decoración de cuando llegaron con su flamante nuevo local a Salamanca pero nunca había entrado al de Madrid quizá por asociarlo con mis años universitarios de cervezas y largas charlas practicando inglés con guiris, bailando y alguna que otra amnesia ocasionada por la ingesta de alcohol sin mucho tiento. Sea como fuere, decía, no me había acercado al Irish Rover madrileño. Ya sí, pero, atención: para comer… uséase, al restaurante, nada de ocio nocturno.
Así que sí, sólo puedo hablar de una cocina de mediodía con menú a 10’50 en el que me permitieron escoger dos primeros: ensalada césar y sopa de ajo ambas cosas bien ricas. Y por lo que ofrecían en la carta y en el menú, si trabajara en ese entorno sería sin duda alguna uno de los sitios en mi lista de menú diario.
Decoración muy cuidada en un local inmenso con varias zonas y dos plantas, no sé, no diría que el Irish Rover es un pub irlandés, o al menos no es la concepción española de lo que significa un pub irlandés.

The service was good. Food is really good. It’s a chill atmosphere in the day. Gets busy at night. Id go back for sure

My favorite Irish in Madrid – and one of my favorite places, period! Very chill, delicious pubby-​American-​style food – try the nachos, burgers (the onion one) and now their jalapeño poppers – and especially the great service. There’s no cover for concerts, and their twice-​a-​year (on their anniversary mid-​Nov & for St. Patricks) feature of The Colonials is can’t miss. It being the biggest Irish bar in Madrid, including a big Terraza, it allows them to have other off-​the-​beaten path events, like Madrid’s Tweet-​Up. And it’s the perfect place to watch us win Pub Trivia on Monday nights!

Estoy de acuerdo con Lolo en tres cosas:
— Tampoco los irlandeses son santo de mi devoción. Por eso a pesar de haber ido a varios conciertos a la Moby Dick, nunca había entrado aquí hasta ayer.
— Pero ciertamente este irlandés tiene algo que lo distingue de los demás; es diferente, para bien, sobre todo curioso.
— Aunque no vendrían mal algunas lámparas más…
Y añado: elección musical demasiado ecléctica (de verdad, demasiado… no se puede contentar a todo el mundo); banquitos para fumadores (o no) en la entrada; trato amable y, no sé, para ser Madrid capital, no me pareció excesivamente caro.
Se puede decir que ha sido un grato descubrimiento.

Laid back atmosphere. Fairly authentic looking Irish joint with two floors and an outdoor deck. Couple of bar areas and a big screen for futbol watching. We only had sandwiches (burgers and chicken) but they were good by all accounts. Service wasn’t outstanding, but she was nice. Guinness was tasty and prices very reasonable. I’d definitely go back…

In Madrid gibt es eine Vielzahl von Irish Pubs. Das Irish Rover habe ich trotzdem gleich an zwei Abenden besucht. Hier trifft man auf ein internationales Publikum und mit etwas Glück spricht auch die Bedienung Englisch.
Abend 1 — ein Samstag: Im Rover wurde das Endspiel der Rugby-​WM Südafrika gegen England übertragen. Der Pub war so voll, dass sich vor dem Laden eine Warteschlange bildete. Als wir drin waren, «besichtigte» ich erstmal die Toiletten. Grundsätzlich sind die ok, aber an dem Abend waren auch die Damen weniger damenhaft. Das ist besonders dann der Fall, wenn größere Mengen Bier im Spiel sind und das ist für Pubs wohl typisch. ;) Danach ging es weiter an die Bar. Bier mit Limo (Radler) zu bestellen klappte erst im zweiten Versuch, da eine der Barfrauen kein Englisch verstand. Das Spiel ging mit 15:06 zu Ende und machte Südafrika zum Weltmeister. Danach leerte sich der Pub merklich. Mit meinen beiden australischen Begleitern traf ich bald auf weitere «Ozzys» die sich das Spiel angeguckt hatten. Nach kurzweiligen Gesprächen und ein paar Pints Bier ging es an dem Abend weiter ins madrilenische Nachtleben.
Abend 2 — ein Montag: Montags findet in einem kleinen Salon im Rover ein Quiz statt. Mehrere Teams (max. 6 Spieler) finden sich um Quizmaster Brendan Murphy ein, um in 8 Runden Fragen aus unterschiedlichen Bereichen zu beantworten. Unser Team bestand am besagten Abend aus zwei Deutschen, zwei Australiern und zwei Amerikanern. Die Jungs aus New Jersey gehören zur Band Trash Mavericks, die in den folgenden Tagen im Rover für rockige Livemusik sorgten und uns eine große Hilfe bei den Musikfragen waren. In der letzten Runde hatten wir etwas Pech und es reichte leider nur für Platz 2. :(
Das Quizz ist in Englisch und die Teilnahme kostet einen Euro pro Person. Der Sieger bekommt den Pott, die zweiten eine Runde Getränke aufs Haus.
Sonstiges: Livemusik, Dart, Pool Billard, Wireless Lan, verschiedene Biersorten, große Burger
Vier Sterne, weil mein Erstkontakt zur Bar etwas schwierig war.