Casa Casi

¡Un gran descubrimiento en el barrio, sí señor! Unilocal nos hace felices por darnos a conocer lugares como éste. Un típico bar de barrio en el que por 4 euros has cenado. Los «pinchos» a los que te invitan con cada caña son bastante más grandes de lo habitual. Con la primera cerveza nos sirvieron un bocatita de filete empanado que estaba muy bueno. Con la segunda, un buen trozo de tortilla de patatas.
Cada caña cuesta 2 euros y lo dicho, con esto ya habíamos cenado. No obstante, también tienen una amplia carta de raciones por si te apetece algo más contundente.
Para terminar, tiene un par de televisores para ver el fútbol, un detalle a tener en cuenta si buscas un bar en el que ver un partido por el barrio de Hortaleza.

Muy cerquita del metro Mar de Cristal está este bar-​restaurante. Hizo de «bar de espera» hasta que llegase la mayoría de la gente con la que saldría ese sábado y que casualmente es de ese barrio, Hortaleza.
Ellos siempre eligen éste sitio por sus cañas y tapas. Es decir, por 2 euros tienes tu caña y unas flamantes tapas en forma de «mini-​bocatas» (de los de «pan pan» bueno) de lo que sea, platazos de alitas, aros de cebolla, calamares. y mil combinaciones.
Es una buena opción si eres del barrio, eres forastero como yo y quieres beber y comer de forma baratérrima. Tiene 2 partes bien diferenciadas, a la entrada con la barra y mesas bajitas y al fondo otra gran sala con más mesas y barriles en forma de mesas y banquetas altas. Además, también tienen una gran tele para los futboleros.

Mucha tela lo de este sitio! Estábamos haciendo tiempo para nuestra reserva en A‘Fenestella (italiano que merece mención aparte) y bueno vimos este bar que no tenía mala pinta y entramos a tomarnos una caña rápida.
Lo que nos alucinó es la tapa que nos sacaron con la consumición. Yo que iba haciendo hambre para en el italiano darlo todo, me veo un bocadillo de salchichas frescas como tapa. Nada de pulga no, bocadillo con todas las letras. El pan estaba exquisito, y el bocata recién hecho, nada de bocadillos rancios hechos de las 5 de la tarde.
Yo sólo lo probé porque si me hubiera zampado eso, ya os comento que no ceno. Pero creo que lo voy a declarar uno de los sitios preferidos de mi barrio, va directamente al top 3. Y la verdad es que la pinta que tenía lo que la gente estaba picoteando era muy buena. Habrá que pasarse más veces por allí.