Breogán

No me gustan mucho los cines Renoir que están en Martín de los Heros, pero el otro día no me quedó otra que ir, porque la película que quería ver solo la echaban ahí. Así que agaché la cabeza y compré las entradas, como buen ciudadano. Y como buen ciudadano, antes de entrar al cine, nos apetecía tomar alguna cosilla rápida.
Como ya hemos probado todos los bares de esta calle, sin muy buenos resultados, acabamos aquí, en este mesón ¿asturiano? ¿castellano? ¿leonés? ¿gallego? Yo diría que tiene un poco de todo. Nos acercamos a la barra y pedimos dos dobles y una coca-​cola.
Sorprendentemente, mi colega volvió con las bebidas y una racionzaca de croquetas que, si bien estaban frías, estaban deliciosas. Comentamos lo pantagruélico de la tapa mientras nos hacíamos fotos en una zona que tienen al entrar a la derecha, que parece salida del mismísimo Juego de Tronos.
Total, que cuando casi hemos terminado las croquetas, el camarero se acerca muy risueño y nos pregunta «¿habéis pedido vosotros una de croquetas?» y nosotros como… «no… como nos la has puesto al lado de las bebidas, hemos pensado que era la tapa». El tipo se ríe así por lo bajini y dice que no eran para nosotros, que se había confundido al dejarlas al lado de nuestras bebidas y que eran para la otra (única) mesa que estaba ocupada.
A nosotros nos entra la risa floja también, nos dice que son ocho euros pero que nos cobra la mitad, y no sabemos muy bien qué decir porque en fin, es verdad que nos las hemos comido, pero es que nos las ha puesto al lado de las bebidas, como si fuera para nosotros.
No sé muy bien en qué acabo la historia. Las croquetas estaban buenas, ¡pero la realidad es que el señor camarero no tenía el bar tan lleno como para cometer esa equivocación tan rara!

No es una maravilla, la verdad. Quiero decir, que es un bar normal, con sus cañas no muy caras, sus refrescos y sus tapas. Raciones normales y no muy baratas…
Peeeero. Pertenece a la ruta que yo vengo a llamar «ir al cine merece la pena». Tal vez soy muy sibarita. Tal vez soy una ilegal. Pero yo voy al cine a dar pelas a aquellas personas que (creo) que se lo merecen y han hecho buenos productos audiovisuales. Que a veces me equivoco, pues también.
Por eso suelo ir a los cines Golem, y los Renoir (también a los Ideal). Pelis en VO. Y de autor/​a. De circuito corto. En fin, que me enrrollo y que lo que quería decir es que, si vais al cine, y en verano, en este lugar tienen terraza, y ya está.