Visitar un mercado de abastos siempre es una experiencia que se vive con todos los sentidos, y si ademas tiene sabor a pueblo y buen género, como es el caso, se disfruta. Aquí podemos comprar carne, magnífica fruta de las huertas cercanas y, como no podía ser menos, pescados y mariscos recién traídos del cercano puerto pesquero: corvinas, lenguados, navajas, camarones, cangrejos… Mas que recomendable la visita.