Ten’s

El local low cost de Jordi Cruz. Un sitio bonito y rico para cenar de tapas en grupo. Gran steak tartare y otros platos buenos como el cazón, pulpo, burrata, bravas y alitas. Porciones enanas es lo único malo.

Este restaurante el propietario es un chef que sale en top chef o un programa de estos. El restaurante está muy bien decorado y ya íbamos con la idea de que sería algo caro. La verdad es que la comida está servida de manera original, y la calidad de la comida es media alta. El problema que le veo yo al restaurante es el servicio. Por el tipo de restaurante que es el servicio es pésimo. Llegamos y faltaba una silla en la mesa, les dijimos que trajeran porfavor servilletas cubiertos etc para uno más y tardaron media hora y tres avisos más en traernos todo. Además que la silla la tuvimos que coger nosotros de la mesa de al lado sino se quedaba uno de pie mirándonos a todos. En fin que una lástima por qué un restaurante de tapas que si mejorara la calidad del servicio, sería un restaurante notable. Precio medio 35 euros por persona.

Glad I got to stop by this place. Came here for lunch and we got to sit outside. It was really nice! Michelin star rated so of course everything we ate was amazing. We had really amazing oysters ($ 6 each) but well worth it. Hamachi ceviche and it was so fresh! Lobster and foie gras rice was also very tasty! Of course we had to order octopus too and it was awesome. Everything was very small so we didn’t leave extremely full but it was a good amount.

Very nice place in front of the French Train Station. Nice tapas and excellent service!

I stumbled into this place for lunch after a hot afternoon of wandering and shopping. I was hoping for a nice glass of wine and much needed A/​C, but the food was out of this world. I had the soft egg with prosciutto, steak tartar and oyster tapas. All were delicious. Presentation was beautiful. Even the bread was better than other restaurants. I highly recommend it. The portions are on the smaller side so if you are more than one person you may need double orders if you want more than a few bites each.

Pretty good, but the service was a bit brusque (not normal for Barcelona), and the food was good, but not amazing. I will readily admit that I am jaded in Barcelona, there is so much good food that in any other city this place would probably rate higher.

Just found the business card to this place and reminded me to write a quick review. Interesting menu, good design and well located between El Borne and Barceloneta.

Aconsejado por un amigo de Madrid que ya ha estado 2 veces en Ten’s, por fin ayer conseguimos quedar para probar este restaurante de tapas de autor de la mano de Jordi Cruz. La calle Rec es una calle peatonal así que hay dos opciones para los que van en coche: tener suerte y encontrar un aparcamiento en la Avenida Marques de l’Argentera o sino optar por un parking. Yo he fallado con el primer intento asi que me he metido en el parking del Born aunque también está el de la Estación de Francia. Bueno, llegué primera al restaurante, el camarero que me atendió fue muy amable y me acomodé en este rinconcito a la izquierda de la entrada en uno de esos sillones comodisimos a la espera de mi marido & Co. La decoración es muy minimalista, todo en tonos blancos y neutros, del techo cuelgan lamparas retorcidas y a la derecha todas pizarras con cartas en letras de colores. Al ser 4 comensales y me dieron carta blanca para pedir la comida en plan «picoteo quiero probar de todo». Empezamos por la ostra con sorbete de pepino, pasando por el steak tartar con helado de mostaza. Seguimos con los calamares a la andaluza al que tengo que ponerle una pega, me los comí con las manos y la fritura de pan rallado se me quedaba pegada en los dedos, el alioli de citricos para mojar estaba delicioso. El «cono de pescadito frito de la feria» me ha parecido un poco seco. El arroz Carnaroli en su punto de cocción aunque igual que el rabo de cerdo iberico estaba MUY salado. Sin palabras para los berberechos en lata, el pulpo y la mini burguer de butifarra !!! De muerte !!! Postres muy buenos aunque muy parecidos a los de AbAC. Pagamos más o menos 50 € por persona.

No nosdefraudo para nada. Tenia especial interes por probar la cocina de Jordi Cruz
Todos los platos que pedimos exquisitos. De lo que mas me gusto fue la innovacion en algunos platos acompañados de humo aromaterapico. Lo ultimo… Todo buenisismo… Si alguien dudaba como yo se convencer que es alta cocina …
El trato muy agradable h con explicaciones al detalle de los platos y pautas a seguir.
El precio muy correcto.
Reservamos para no tener sorpresas.

Tolle Tapas, kreative Ideen, leistbarer Preis. Dieses Lokal, das von einem der berühmten Köche Kataloniens betrieben wird, ist wirklich interessant. Die Tapas-​Karte macht es einem leicht, sich quer durch die Küche zu kosten. Bei uns war alles erstklassig, bis auf das Faktum, dass wir alleine im Lokal saßen.

Visita fugaz a Barcelona. Descubrimos este sitio por recomendación. Al ser propiedad de Jordi Cruz (diría que es la versión barata de ABaC, donde consiguió sus estrellas Michelin). Llegamos a la hora de cenar un lunes, así que el restaurante no estaba muy lleno, conseguimos mesa en seguida, sin problemas.
El local es bastante sencillo pero decorado con mucho gusto. Predomina el blanco y la modernidad. La carta simple también, cosa que agradezco, no me gusta la sensación de sentarme, que me den el menú y perderme entre platos y platos sin entender nada. En parte temíamos que las tapas fuesen ‘escasas’, dado el estilo del Chef y su ‘nueva cocina de autor’, pero el caso es que nos sorprendimos bastante a pesar de que no eran muy abundantes.
Eramos cuatro, así que pedimos un buen vino; la camarera fue muy amable al recomendarnos un tinto de la tierra. Estaba muy bueno, suave y con mucho cuerpo. Con una copa de buen vino todo sabe mejor. Optamos por pedir un poco de todo: ‘Patatas bravas con alioli espumoso y sofrito picante’, ‘Tostas de anchoas del cantábrico con tomates y aceitunas negras’, ‘Huevos casi estrellados con ibéricos’ (esta última nos decepcionó bastante; puedes encontrar ‘huevos estrellados’ increíbles en cualquier sitio de España, mucho mejores que estos). Los platos estrella de la noche fueron ‘Lágrima y rabito ibérico a la brasa con parmentier de garbanzos a la vainilla’ y ‘Barbacoa de alitas de pollo y colitas de langostino al ajillo’. INCREIBLES, sobre todo el último. Lo recomiendo; volvería a Barcelona solo por esta tapa jejejeje Además la presentación ayudó mucho. Estaba todo muy bien pensado y ‘puesto’. No encantó.
Por supuesto, también nos atrevimos con los postres: ‘Texturas de chocolate con café, cacao, toffee y regaliz’ y ‘Torrija de brioche con texturas de vainilla y naranja confitada’. Ambas dos deliciosas y exquisitas.
Temíamos la cuenta, pero al final salimos a unos 20 euros cada una, así que nos pareció bastante asequible. ¡Ojalá pudiésemos permitirnos ir al ABaC!

El pasado día 26 de octubre mí querida mi mujer y dos de mis mejores amigos quedamos para comer. El sitio elegido fue el Ten´s, situado en el Borne Local.
Mesa reservada a las 14:00.
El Ten´s es un restaurante del mediático y estrellado en tres ocasiones Jordi Cruz. Esta es su propuesta «económica», y una acertada manera de abrir su cocina a un público mayor. Basado en una carta sencilla a base de tapas y platillos de autor. Calidad de producto, creatividad y presentación. Concepto este que se ha puesto de moda en Barcelona y al que grandes chefs están recurriendo últimamente para satisfacción de los potenciales consumidores.
Llegamos a las 14.00 al Ten´s.
Puedo ver que dispone de dos sencillas terrazas, una enfrente y otra en un lateral. Nada del otro mundo. Sinceramente no invita mucho a comer en ellas. Creo que podrían cuidarlas un poco más. Entramos en el restaurante. Un pasillo ancho con una preciosa barra antigua a la izquierda te da la bienvenida, enseguida entras en el local. Un espacio amplio, con techo alto, pero con una decoración sencilla y vulgar. Algo frio el ambiente. Las ventanas que dan a la calle permiten que entre luz natural en el local, lo cual siempre se agradece. La iluminación es buena y consigue lo que no consigue la decoración, calidez.
Observamos la carta con delicadeza, cariño, atención y con respeto, para ello nada mejor que una caña. Una excelentemente bien tirada caña y en su correspondiente vaso, algo que cada vez cuesta más de ver, a un precio de 1,90 euros.
Veamos que aconteció:
Empezamos por unas notables bravas con espuma de alioli espumoso y sofrito de picante, muy buenas, genial la patata y su cocción, el sabor intenso y poderoso, pero sin llegar a ser un volcán, de las mejores de Barcelona, continuamos con un excelente cono de feria con pescadito frito al polvo de picada, una maravilla de pescadito, quizá lo mejor de la velada, de diez; seguimos por unos muy buenos calamares a la andaluza con alioli de citrionela, muy buenos, muy buen producto, fresco, perfecta fritura, y muy buena la combinación del alioli; seguimos por unas mini hamburguesas de butifarra Thai, bien, buena carne y divertidas de comer; proseguimos con un pulpo cocido, pimientos de la vera, patata con aceite de aberquina y humo de haya, bien, correcto, el pulpo muy bueno, pero no me dijo mucho el plato en su conjunto; seguimos, con un notable arroz venere con gorgonzola, cigala asada, nueces y rúcula, arroz en su punto, muy meloso y sabroso, con sabor intenso, quizá esperaba algo más de este plato; seguimos con unas más que notables barbacoa de alitas de pollo y colitas de langostino al ajillo, servidos en una especie de parrilla con piedra ardiendo para que terminase de hacerse el pollo, muy bueno, crujiente, de gran sabor, una maravilla, recordaba bastante al pato laqueado que hacen en los buenos restaurantes chinos, pero eso sí, sin la exquisitez que te da el pato; por último unos pobres huevos casi estrellados con sobrasada y lomo ibérico Joselito, no me acabaron de convencer, los huevos muy buenos, pero la patata que lo acompañaba no me convenció, plato algo flojo.
Por ultimo un postre de texturas de chocolate con café, cacao, toffe y regaliz, y que compartimos, muy bueno, nos encantó. Al mismo tiempo llegaron los correspondientes cafés.
Uno de mis amigos bebió, para mi disgusto, coca cola y agua con gas, mi mujer, con buen criterio se decantó por una copa de vino blanco y mí otro gran amigo y un servidor por una botella de Fincas Resalso Bodegas Emilio Moro 2.010, un maravilloso Ribera del Duero que nunca falla, de color brillante, con buena intensidad en nariz y estructurado en boca.
Total: 101,20 Euros.
Servicio poco profesional, hacen lo justo y nada más. Todo para compartir. Raciones pequeñas, hay que pedir unas dos como mínimo por cabeza. Carta de vinos correcta, varias denominaciones. Se puede pedir vinos a copa. Recomendable la barra que hay al entrar, ideal para hacer una caña y tapa.
Sentimientos encontrados con el Ten´s. Cierto es que todos disfrutamos de la velada y de su propuesta gastronómica, cierto que se nota la creatividad en la confección de las tapas y su presentación, cierto que el producto es de calidad y cierto que algunas hasta llegaron a sorprender, pero no es menos cierto que ninguna llegó a enamorar. Me da la sensación de que Jordi Cruz no está muy encima de su obra pequeña y es posible que no le dé al Ten´s todo el cariño que si le da al Abbac, su gran portaviones. Dicho esto, lo recomiendo, es un buen local, buenas tapas y buen producto, pero pensábamos que íbamos a comer tapas de Ferrari y se quedaron en unas BMW, que no está nada mal, pero no es lo mismo.
Después de la velada nos fuimos caminando hacíà la terraza de la Duquesa que se encuentra en el Paseo Colon, donde disfrutamos de una botella de cava Gramona Gran Reserva con vistas a la Barceloneta.
Señores y señoras, si van al Ten´s disfrutaran. Yo volveré.

I count myself fortunate I stumbled onto this place earlier tonight. Chef Jordi Cruz has an outstanding pedigree with his 4 Michelin stars. Let’s forget I know this less this shades my review.
Ten’s menu caught my eye. It hung off the awning leaning into the pedestrian path’s center. It highlighted the 15 tapas menu items in 3 languages including English. I quickly scanned looking for something interesting and I found it, but would my friends want to try this restaurant? They did.
After checking with management, we sat ourselves outside. As our server was receiving our drink orders, he sung Chef Jordi’s praises. For myself, I ordered the foie gras dish with sichuan pepper ice cream (intriguing) and the slow cooked egg dish. I also shared some bread, fried potatoes, and black rice.
Onto the dishes. Mine were very attractive dishes, quite well presented. I even added pictures to the Unilocal photo section. Overall, the foie gras dish was quite sweet. The crunchy topping alleviated some of the sweetness. I was hoping the sichuan pepper ice cream might lend slight heat, but even that was blatantly sweet. What sat between each foie gras piece was lost in the shuffle.
The second presented dish was the slow cooked egg. It sounded really good and again, presented well. However, I was told that to properly eat it, one must swirl it around thoroughly and apply it atop the tomato toast. My gorgeous dish became a seething eggy mass. It tasted nice, the egg overwhelmed everything else. The iberian ham, sobrassada paprika sausage, mature gouda — all lost.
Where does this leave Ten’s? Merely satisfactory. I appreciate Chef Jordi Cruz’s presentation skills and willingness to pair disparate items. However, I am underwhelmed when a dish doesn’t elevate any one flavor or masks too many pieces.
Also, the service was confusing at times. Our waiter was quite thorough, but sometimes too quick with his suggestions. Customer (s) and waiter must work harder to overcome both language difficulties (he spoke acceptable English, though quick and Catalan tinted) and a challenging menu.

Tres estrellas y media para este proyecto «low-​cost» de Jordi Cruz. Se nota que les falta rodaje para pedir tanta pasta por tapas un puntito más elaboradas que la media. Hay platos muy destacabes, como el pulpo, y otros mucho más flojos. La impresión es buena, y tiene pinta de mejorar en un futuro no muy lejano. Espero volver a visitarlo en breve. Os dejo unas fotos para que os penséis la visita. Yo me dejé 50 €, pero sin reparar en nada (postres, botella de vino de 23 €, vinos de postre…)