Aunque lleva poco tiempo abierto(desde verano 2015), por lo visto pertenece a los dueños de un restaurante de toda la vida en Ávila, Los Candiles. Y se nota, porque detrás de su aspecto de restaurante moderno la carta esta compuesta sobre todo por platos tradicionales. Hay un menú por 26 € que incluye cualquier primero, segundo, postre y bebida. Ningún problema con que pidas platos para compartir: todo lo contrario, te los preparan y van sirviendo uno a uno. Todo lo que pedimos, exquisito. Desde los entrantes hasta los postres. Y muy, muy abundante. Como detalle, como eramos 2 nos pusieron una botella de vino en vez de dos copas El trato fue genial durante toda la cena y muy familiar. Toda una experiencia. Eso sí, necesario reservar antes, que por lo visto se llena casi todas las noches.