Wengué The Sofá Factory

¿Quieres muebles hechos a la medida? ¿Te vas a cambiar de casa y quieres renovar los antiguos muebles gastados? Es una necesidad que no aparece demasiado, pero que cuando aparece es necesario saber dónde hacerlo… Y hacerlo bien. Aquí les tengo el lugar donde se llenará cualquier necesidad de muebles.
En Wengué la gracia es que todos los muebles son sumamente personalizados. Aquí tú puedes elegir tu tela, tu material, tu diseño y lo que necesitas, es sumamente útil. La gracia es que tú elijes todo y ellos te lo arman. Por ejemplo, puedes elegir un diseño a realizar en espacio reducido, y ellos son capaces de llevarlo a la realidad. Realmente bueno.
Su especialidad son mesas y sillones y pueden realizar tu pedido con cualquier tela, madera, tamaño y forma. Ojo, que los precios no son baratos. De hecho, son más bien caros. Pero, para personalizar tu vida, lo vale.

Si usted es un amante del diseño, los colores, estampados estrambóticos y la mezcla de lo moderno y antiguo, este es su lugar.
En el conocido Barrio Italia hay un local que me encanta y es que es ideal para aquellos que buscan decorar su departamento con muebles y tapizados originales. Seamos realistas, no hay nada más aburrido que ir a una tienda por departamentos y comprar el living que tiene todo Chile, esos de colores opacos que en vez de darle vida a nuestro hogar lo torna aburrido. Por ello, siempre que quiero darle un toque de color a mi casa pienso en esta fábrica de muebles.
Hace unos meses tenía un par de sillas que llegaban a dar pena de tan viejitas que estaban. Por un valor sentimental no pude deshacerme de ellas, así que empecé a buscar donde repararlas y cambiarles el tapiz. En esa búsqueda encontré Wengué, hice las consultas por teléfono y al otro día llevé mis sillas. Elegí el tapiz y me dijeron que en una semana fuera a recogerlas.
A la semana, cuando entré vi unas sillas hermosas y pensé: «hubiera vendido las viejas y comprado estas» y para mi sorpresa cuando pase mi boleta para el retiro me dijeron: «allá están sus sillas» y ¡ERAN LAS MISMAS DE LA ENTRADA! Plop.
No podía creer que esa chatarra que traje a reparación eran las mismas que me encantaron. Desde ese día quedé enamorada de esta tienda. Y no sólo reparan, también venden mesas de centro, sillones, poufs, banquetas, normandos y comedores.