El Diez es un lugar que me cae no gordo, gordísimo. Cada vez que paso, se me antoja comerme una vaca entera, huele al mismísimo paraíso del sabor. Y es que todas y cada una de las veces que he ido, salgo más convencida de que los argentinos saben comer y cocinar.Te voy a ser bien sincera, es un restaurante…