Es cierto. Muchos de los negocios se encuentran en la calle, literalmente sobre los camellones, en medio del bullicio de los autos que van y vienen, que van y vienen, y nunca desaparecen; el flujo esquizofrénico de los vehículos. El chiste es que los antojitos mexicanos La Güera si se esfuman, y sólo vuelven a…