Todo el mundo necesita ese kiosko 24 horas, el lugar de bajón para esos días que no pasas por McDonalds. Sé que me entienden. No lo puedo explicar, pero a las 4÷5÷6÷7 de la mañana después de una noche de lo que sea tengo mucho, pero mucho antojo para comer unas papas fritas Lays. Intento no tenerlas en casa…