Theobroma Cacao

Lo más lindo de mis pascuas no fue el chocolate. Pero al saborearlo ahora que las pascuas pasaron recuerdo con mucho cariño los momentos vividos.
Por esas casualidades de la vida termine con un arsenal de huevos de chocolate de Theobroma Cacao. Mi vieja me preguntó dónde iba a ir a comprar y yo la mande a otro muy buen lugar que queda cerca. Pero por cuestiones de logística terminé comprando el sábado a la tarde junto con otros muchos colgados (dilatadores de responsabilidades). Así que compre dos huevos, para sumar a la canasta para la foto (que no se llevó a cabo).
Terminamos de comer unos soberanos fideos frescos de Sanguinetti con varias salsas que cocinó mi mamá (Pesto, Fileto y Hongos) y como el día estaba hermoso dejamos los huevos de lado y nos fuimos al parque.
Ahora que tengo una bolsa de Theobroma llena de chocolates, me acuerdo de ese día en el parque con toda mi familia. Jugando con mi sobrino, charlando con mis primas, tomando mates con mi hermana, mi vieja y mi novia. El huevo de pascua dejó de ser un objeto de deseo y pasó a ser un vehículo de añoranza. Por eso te dicen que el chocolate complementa al amor.

Para las fiestas, algún iluminado amigo de mi papá tuvo la deferencia de hacerle un presente, y consistía en una caja tamaño extra large de bombones surtidos de ésta chocolatería. Y fue amor a primera vista. No puedo precisar cuánto tiempo duró, pero fue una experiencia formidable, ja ja.
La presentación era hermosa, hasta me gustó la bolsa donde veníà la caja, me pareció muy simple y elegante.
En vistas de que había establecido un vínculo amoroso con éstos chocolates, chiste de por medio, decidí ir a conocer el lugar de dónde salían, así que busqué la dirección y fui por todo.
El lugar es muy lindo, y como es natural, por lo menos para las personas locas por los dulces como yo, mis ojos iban rotando de chocolate en chocolate, hasta que decidí comprar algo. Creo que tardé más en elegir que cuando compré mi vestido de graduación.
En fin una experiencia recomendable ara tus sentidos, para tu vista ir al local (donde te atienden de maravillas) y para tu paladar y olfato mientras estés disfrutando los bombones más ricos que he tenido el placer de probar.

Si existiera la materialización de un sentido, sería Theobroma Cacao. El gusto en su máxima expresión, donde aparecerá en todos los tamaños, dimensiones y colores. Adaptado a cada una de las fechas emblemáticas donde el chocolate puede ser el mejor de los presentes, o quizás para dar un gusto a un ser querido.
Esta chocolatería se ha convertido en un hito de la finura. Los rosarinos eligen hoy a esta casa a la hora de hacer un presente, o para agasajar a los comensales en una boda o evento empresarial, o un té entre amigas.
La combinación de buen diseño, y calidad en la materia prima, han sido los motivos de la elección de muchos. Sabés que si entrás a Theobroma, nunca te irás con las manos vacías, y jamás quedarás mal. Así sea un pequeño presente.
Los envoltorios que utiliza esta firma son muy característicos de ellos. Es como una marca registrada. Te da hasta lástima deshacerte del envoltorio después de comer la mercadería. ¡Es tan fino! Combinan papeles, cintas, lazos, moños, brillos, todo un diseño Glam que deja vislumbrar que tienen el lema de que el papel no es menos importante que el producto de adentro. Queda a las claras que esto se paga. Pero hay productos que saben adaptarse a todas las economías. Pasá y date un gustito.

Es adorable, de elaboración propia y riquísimo todo lo que venden ahí. Todos las sucursales poseen la misma dedicación y excelente atención de las empleadas al público.
Los productos que tienen a la venta, poseen una temática que va cambiando con las festividades que se avecinan, arman combos y regalería para el día de la madre, del amigo o de los novios. Los precios no son baratos pero lo valen porque los dulces son de muy buena calidad y sabor, te das cuenta solo con sentir el aroma. Blanco, negro, amargo, semi amargo, cacao y en todas las variedades que se te ocurra degustar.
Arman muy bueno paquetes para regalar y quedar bien con los seres queridos, tienen en cuenta todos los detalles, desde la caja o la bolsa donde transportarlos, hasta el moño de cinta bebe con que cierran el armado.

Nunca me copó la idea de San Valentín… todo lo contrario. Pero no voy a negar que me gusta que Señor Novio aproveché la ocasión para hacerme algún regalito.
Ayer no me lo esperaba para nada, me hizo abrir la puerta de mi ropero, diciéndome que ahí estaba mi gata haciendo lío, y cuando la abrí no estaba la gata sino una bolsita de cartón. Ni leí el nombre, así que me puse re contenta cuando me di cuenta lo que era!
Adentro había una cajita hermosa, y un corazón envuelto. No sé como resistí a no abrirlos enseguida y primero le saqué fotos. Primero abrí el corazón, porque tenía ruidito y quería saber qué había adentro! Cuando lo abrí me encontré cinco bombones más. La cajita tenía un montón de bombones. No saben qué rico aroma a chocolate! y lo más importante, estaban muy muy buenos! (Compartí todos con mi novio, menos uno que era como los Ferrero Rocher que no pude entregar jaja) Comimos anoche, al mediodía, y todavía quedan para el postre de hoy.
Nunca fui a comprar, pero le pedí data a mi novio para compartirla, me dijo que le gustó que lo asesoraron muy bien y que le pareció que los precios no eran una locura.

La vidriera del negocio de calle España ya es algo que tienta, con alguna escultura en chocholate según la festividad adecuada para acompañarse con chocolates más próxima.
Esta chocolatería, que se encuentra a pasos del Shopping del Siglo tiene exquisitos chocolates y bombones de elaboración propia con una presentación muy delicada que los hace ideales para regalar o hacer una atención.
Al entrar, se siente al mismo tiempo el golpe de frío del aire acondicionado como del aroma a chocolate amargo, la música es suave y el lugar inmaculadamente blanco, por lo que uno siente que entró en otro mundo.
En época de fiestas también ofrecen budines y pan dulces caseros asi como packs que incluyen variedad de chocolates.
Son muy recomendables las trufas de chocolate y los paquetes con mini huevitos de pascua en esa época.
Suele ser bastante concurrida durante las fiestas, ya que mi última visita fue en la mañana del 24 y el local estaba diezmado y quedaban muy poquitas opciones para elegir.
La atención es siempre muy correcta