Hotel Bahía

Hace muchísimos años que este hotel esta instalado en Rosario. Es uno de los pocos edificios que siguen en pie, intactos desde sus comienzos.
El Hotel Bahía es una alternativa en costos y no es un dato menor su tiempo de existencia. Manteniedose en pie desde hace 40 años ha sabido sortear problemas de competencia, modernidad y tecnologías que hoy pueden ofrecen cualquier hotel cercano.
Sus instalaciones son cómodas pero antiguas, no han hecho grandes cambios de mobiliario y sigue mantienendose en 2 estrellas como en sus comienzos.
Se encuentra ubicado en pleno centro de la ciudad, a pasos de la Peatona San Martín bien cercano a los centros comerciales más propios de Rosario. Su fachada se asimila al estilo colonial en su infraestructura y colores. Dispone de habitaciones matrimoniales, simples, dobles y hasta cuádruples equipadas de manera sencilla y modesta, pero amplias (a diferencia de los hoteles nuevos que pretenden hacer màs habitaciones y pequeñas). Tv con cable, aire acondicionado, calefacción, Internet, caja de seguridad, wifii, todo lo que cualquier hotel puede ofrecer.
Creo que lo novedoso de Bahía es su bar tipo snake que permanece abierto durante las 24 hs para quienes se hospedan allí. Ademas cuenta con cocheras privadas.
Sus medios de pagos son amplios, trabajan con todas las tarjetas de crédito y según la época del año, lanzan promociones.
Es un Hotel Modesto, barato y céntrico. Una buena opción para gastar poco, teniendo las comodidades del centro. Conocer Rosario y no dejar una fortuna en el Hotel.

En pleno microcentro de Rosario está ubicado el Hotel Bahía. Cuenta con más de 40 años de trayectoria y sus instalaciones, aunque bien mantenidas, parecen haber quedado detenidas en el tiempo con un estilo clásico de los ´70.
En el ingreso, paredes pintadas de naranja, cortinas verdes y sillas de madera torneada contrastan con el plasma de 32 pulgadas que se incorporó hace poco a su bar comedor.
Aunque modesto y sin ostentaciones, este hotel de dos estrellas ofrece todo para una estadía sin lujos pero con los servicios básicos bien cubiertos: aire acondicionado, calefacción, desayuno, estacionamiento propio, cajas de seguridad, baño privado, TV con cable e internet inalámbrico.
Cuenta con habitaciones simples, dobles, triples y familiares. Como está ubicado cerca de la «zona roja» de la ciudad, ha cumplido muy bien su función de albergue transitorio durante mucho tiempo. Esto no quita que también reciba una gran cantidad de huéspedes que se alojan por varios días y que aprovechan sus excelentes tarifas y ubicación: está a pocas cuadras del cruce de peatonales y de Av. Pellegrini, cerca del Río Paraná y en un punto de muy fácil acceso a todos los servicios públicos de transporte.

Lleva más de 40 años este hotelito, es más, fue quedado como edificio solo en medio de los derrumbes y obras que hubo a su alrededor.
Este hotel, que fue una vieja casa colonial, fue acondicionándose para recibir a sus pasajeros a medida que pasaba el tiempo. Sobre el pendíà la espada de Damocles de las nuevas normativas del retiro de la fachada hacia atrás, pero lo superó con creces.
Es sencillo, no por eso bien acondicionado. Sus habitaciones no son espaciosas pero tienen lo que deben tener, sin lujos ni criterios decorativos definidos.
Música funcional, desayuno, wi-​fi, televisión por cable, aire acondicionado y calefacción y baño privado. También tiene servicio de cocheras.
Es un Hotel 2 estrellas, te aclaro.
Lo que más me divierte, es que si entras a mirar cómo es el hotel, tienen en su patio típico colonial una fuente que se les ha ocurrido decorar con luces verdes pero de esa tipo manguera que hace las delicias de la decoración kitsch, me encanta.
Apenas entras, tienes un pequeño comedor bar, que más de una vez me ha encontrado en las noches porque está abierto las 24 hs. Debes ser cliente, pero con una buena charla de por medio, te dejan entrar.
Para los precios, tienen que consultar porque siempre tienen promociones especiales. Incluso para parejas, se entiende?.