Heladeria Bajo Cero – Brown y Dorrego

Este heladería es una más de las propias de la ciudad de Rosario. Tienen un montón de locales por diferentes zonas de la ciudad y también en localidades vecinas como Arequito, San Lorenzo, Baigorria, Ricardone y Capitan Bermudez. No se si tiene tantos locales como Grido, pero le corre parejo.
Particularmente no me gustan mucho los helados que ofrecen, me parecen muy artificiales y poco artesanales y no les encuentro demasiado sabor, sino más bien son aguados e insípidos. Los gustos al agua son los que más safan, y los que siempre elijo cuando no me queda otra que tomar helado en Bajo Cero.
Hay un local enfrente de la casa de una amiga, y siempre que vamos a comer a su casa y nos antojamos de postre, como sus muy vagas y no queremos ir más lejos, terminamos comprando en este lugar a pesar de que a ninguna nos gusta demasiado. Es lo que hay, la ley del menor esfuerzo!!!
Los locales son más bien clásicos, no tienen nada especial que los destaque ni que pueda llamar mi atención. Hace poco ví que renovaron un poco la imagen, modernizando el logo y agregando colores y dibujos en su página web, pero los locales siguen siendo igual de clásicos y aburridos.
Además de helados, venden tortas HELADAS de frutilla, con nueces y almendras, de dulce de leche, entre otras opciones y tienen una línea de postres frutales, con sabor a baileys y de chocolate, que parecn muy tentadores pero que aún no probé. Incorporaron también helados libre de gluten para celíacos.

Esta es la Bajo Cero a la que recurro para matar las ganas de comer un helado cuando no tengo ganas de ir a ningún otro lado! Tiene la variedad de sabores justa y también hacen Milkshakes. Por la cercanía con el parque, también venden gaseosas y los fines de semana está siempre llena. Ahora en verano es normal que durante las noches se siente mucha gente adentro y afuera a tomar helado, y hace poco cambiaron su puerta, algo que sus clientes agradecimos, antes tenía una que se deslizaba y pesaba una tonelada, ahora es una puerta de vidrio normal y corriente. De Bajo cero me gusta la frutilla a la crema (–dicen que soy aburrido (ups, De la Rua se metió en mi cuerpo!!! help!!!)) jajajajaja también me gusta el chocolate con nuez y la crema rusa! Suele estar atendida por sus dueños que son muy amables y atentos y de paso, son buenos vecinos! ;) (hola vecino!!)
Otro punto positivo es que si comprás para llevar, siempre te preguntan si te querés llevar algún conito y te lo ponen en la bolsa, eso es un gran gesto!!! en la heladería más cercana, que está en el Boulevard si hacen eso te lo cobran!!! y a precio de dólar!!!
Así que Bajo Cero, no decepciona! :)

Tengo muchos recuerdos de mi infancia donde mi mamá nos tranquilizaba con helados de Bajo Cero. Son y siempre fueron sus preferidos. No se muy bien por qué, a mi gusto no sobresalen del resto y es más, comparados con algunos otros artesanales, son muy inferiores.
No hay sabores muy diferentes a la mayoría ni el lugar en sí es muy llamativo. Como ventaja tienen que no son caros y que tienen delivery. Además el local tiene lugar afuera, como para los fumadores o a los que no nos gusta tanto encerrarnos.
Bueno, no es feo feo, es normal, pasaste, tenias 30 pesos, te compraste un helado al pasar. No es de esos de «VAMOS A BAJO CERO QUE ME EMOCIONO», pero se puede. Ya lo he dicho en otras reseñas, yo soy catadora de helados y este no sobresale en nada de los demás.

Bajo cero es la heladería preferida de mi abuela desde que tengo memoria y hay un gusto particular, que es el chocolate de la casa, que acompañó cada reunión familiar de mi infancia.
En la familia somos muy fans del helado y de los gustos engordantes y este glorioso gusto, de un cremoso chocolate, con dulce de leche repostero y pedacitos de merengue, siempre fue nuestra debilidad. El resto de los gustos son igual de ricos, pero uno siempre tiene su favorito. Recomiendo la frutilla al agua para bajar el chocolate de la casa.
Lo que tiene de bueno esta heladería es que a pesar de estar hace años en la ciudad, nunca tuvo un boom como algunas que le compiten, por lo que los precios son más baratos y la calidad también es buena. Si es pleno enero, 4 de la tarde y estamos a fin de mes, darte el gusto en Bajo Cero es una excelente opción para calmar el calor agobiante sin gastar una fortuna.
Tienen varias sucursales en distintos puntos de la ciudad y en todos sus locales uno puede consumir el helado ahí o hacer el pedido desde la comodidad de la casa y que el delivery te lo acerque.

En Dorrego 5 bis se encuentra una de las sucursales de Bajo Cero. Como caracteriza a esta marca, hay una gran variedad de gustos de helados, que aumentan día a día.
El precio es conveniente, el kilo sale 125 pesos y hay una oferta de comprar un kilo y medio, costando los 500 gramos, la mitad del valor común, por lo cual con 160 pesos compramos 1,500 gr del mejor helado.
Generalmente me lo llevo a casa o me lo alcanzan con el servicio de delivery, pero también se pueden disfrutar en la heladería, en la parte interior o en la vereda, cuando ya los rayos del sol no calientan.
Dentro de los gustos se destacan chocolate y dulce de leche de la casa, que además del helado base se agregan trocitos de merengue y cucharadas de dulce de leche, muy adecuado para los que tienen que cumplir un régimen de bajas calorías.
Pero además de estos sabores prohibidos podemos tomar de otros gustos menos culposos e igualmente exquisitos, como la crema de maracuyá, los kinotos al whisky, la crema de cerezas y la naranja con cascaritas. Como verán hay para todos los paladares. Recomiendo probarlos a todos para decidir cuál es el mejor!