Colegio Madre Cabrini

Es mi colegio de toda la vida, fui desde salita de 4 hasta quinto año de la secundaria. También fueron mis hermanas y mi hermano sólo hizo salita de 4 porque en ese momento era la única mixto. Ahora van mis dos sobrinos y una más se suma este año a la sala de 3.
Mis amigas del alma son de la escuela y ahora muchos de sus hijos también van. Porque es un colegio familiar de clase media. La cuota es mucho menor que otros privados y si bien la enseñanza es religiosa, no son fundamentalistas.
Mi paso cabriniano fue muy feliz, los docentes siempre fueron buenos y a nivel educativo es buena, digamos que normal.
Hoy sigue siendo así. Es un colegio muy buscado para los ingresos a jardín y es difícil conseguir cupos. Hay desde sala de 2 años hasta preescolar en turno mañana y tarde. La primaria también es con dos turnos para elegir. La secundaria, sin embargo sólo es por la mañana.
Por la tarde se ofrece una cantidad de talleres para todos los niveles. Mis sobrinos van a fútbol y les encanta. En algunos casos son los mismos profes. También hay teatro, radio, arte, danzas.
Otra particularidad de Cabrini es que allí también funciona la escuela de educación especial Santa María y aunque comparten instalaciones, la dirección es aparte. Con Santa María se realizan trabajos de integración de los chicos con posibilidades de ingresar al aula de Cabrini, acompañados de un facilitador, apostando a la inclusión.
Para mí es un lugar de mucho cariño y afectos. Cuando voy a los actos de mis sobris me cruzo a maestras de mi primaria y la verdad es que me da mucha nostalgia.
Es una escuela bárbara.

Tres generaciones de mi familia concurrieron a este colegio desde jardín hasta el último año del secundario.
Consta con un nivel inicial desde jardín de 2 años hasta preescolar, de turno mañana y tarde. Cuenta con una guardería antes y después de horario de clases, que resulta muy útil para los padres que trabajan y no pueden llevar o retirar a los niños en el horario exacto ya que coinciden con los de su empleo.
Además tiene enseñanza primaria y secundaria (antiguo E.G.B) y un anexo de escuela especial, que se llama escuela Santa María (el alumnado es mucho menor, pero las instalaciones se comparten y los chicos están integrados).
El secundario no tiene turno tarde. En este horario además, se ofrecen todo tipo de talleres para el alumnado u otros niños que no concurren a la institución. El costo es bajo en comparación con otras academias. Brindan clases de guitarra, piano, cocina, teatro, patín, pequeños compositores, fútbol, básquet, entre otros.
La institución es católica apostólica romana, y lleva 116 años en la enseñanza.
Es una escuela con subvención del 100% brindada por el estado, sin embargo tiene una cuota, la cual es accesible. El alumnado que concurre pertenece a la clase media.
Por calle Pellegrini se encuentra el famoso cine de Cabrini, y aunque no pertenece al colegio ya que este lo alquila, se suelen proyectar algunas películas (nunca un estreno en cartelera).
Siempre que voy a retirar a mis primas, la puerta esta llena de padres y madres que retiran a sus niños. Para conseguir estacionamiento resulta ser un dolor de cabeza…