Por lo que escuché, Rio Cuarto no tiene una gran oferta gastronómica, entonces una excepció sería La Piojera. El lugar, que hoy es uno de los más coquetos de la ciudad, obtuvo su nombre del fanatismo de los dueños por la banda(si Los Piojos), aunque hoy te cueste asociarlo de esa manera por el estilo y la onda del lugar. Me tocó formar parte de los festejos de sus quince años, poniendo música, pero arranqué como comensal. La carta ofrecía platos relativamente simples, pero sabrosos. De entrada comímos un Ceviche de salmón con Quinoa(sin la quinoa hubiese sido un gol), champiñones salteados, y una empanda de carne cortada a cuchillo, bien. El principal, un ojo de bife al punto de la casa y realmente estaba muy rico, tal ves las papas y la crema que acompañaban eran medio muy«pesado» para acompañar un bife jugosísimo y tierno. La barra, generosa pero desordenada en términos de prioridades, tiene botellas de Gin y whiskys importados ricos, al lado de una pared de Cusenier, un detalle así hace que pirdas la fe en la barra, pero no es así, mis varios Rusty Nail pueden probar lo contrario. Si la gente de Rio Cuarto descubre esta parte del bar y se retroalimentan sería un golazo, pero aún así es un lugar lindo, para visitar en cualquier momento del año.