Doña Tita

Doña Tita es un buen lugar si hablamos de plan familiar. Se come bien, no es caro y tiene kínder. Cantamos bingo!!!
Es una parrilla típica. Muchas mesas, mozos legendarios, aromas tentadores. El salón es grande y hay demasiadas mesas para mi gusto. Igualmente, la balanza se inclina a su favor ya que ostenta otras ventajas. Se come muy bien y las porciones son abundantes. Matambre de cerdo y tira pedimos en Doña Tita y es una verdadera delicia. Papas fritas sequitas. Ensalada tranqui, no pretendamos nada gourmet, pero la verdura es fresca. Me han recomendado mucho las pastas de este lugar, ya tendremos oportunidad. El apartado de la carta dedicado a los postres es una oda a lo clásico. Flan con dulce de leche y frutillas con crema, mis favoritos.
El Kinder funciona en un anexo al salón principal y eso inquieta un poco, porque si no te ubicás estratégicamente no sabés a ciencia cierta en qué andan las criaturitas de dios. Si llegás temprano, o vas un día de poca gente, hay ubicaciones que te permiten ver la puerta del Kinder. Más allá de la vigilancia que uno pueda llevar adelante desde la mesa y dándose una vueltita (tema aparte: la designación de a quién le corresponde pararse), hay una chica que está con los niños, asistiéndolos.
Y, por último, pero no por eso menos importante, los precios son más que razonables.

Doña Tita es una de las parrillas mas conocidas de Funes, en parte por su ubicación, ya que al estar sobre la ruta 9 es imposible que no la veas y en parte a la buena atención que uno recibe cuando va a comer ahí. Sus dueños saben que el boca en boca funciona mucho en Funes y es mas importante que estar en una red social, por eso te atiende como los dioses.
La comida es excelente, desde las achuras y el asado hasta las pastas caseras. Los platos no tardan mucho en llegar y son bastante abundantes. Para aquellas personas que están a dieta, les cuento que en este restaurante van a encontrar menúes light.
El lugar cuenta con un kinder para que los chicos puedan jugar mientras esperan la comida o mientras los grandes se quedan hablando en la sobremesa. Tiene también un patio de verano para disfrutar de las noches estrelladas y un salón cerrado con ambiente climatizado para el invierno.
Es uno de los lugares que mas me gusta de Funes, asi que lo recomiendo totalmente!