Me pregunto si en mi barrio hay mucho vegano o qué pasa porque entre que me acuesto y me despierto inauguran una verdulería. David es la última incorporación y compite con 3 locales similares en su manzana; para distinguirse instaló aire acondicionado y atrajo clientela con la ola de calor… mientras tenía luz. La oferta de frutas y verduras es buena, la calidad satisface aunque los precios no se achican. Si sos medio obse podés seleccionar personalmente la mercancía; o será que la meticulosa soy yo porque tan pronto me ve la cara el señor que atiende me dice: «Elija usted señora, elija nomás». La tierra está a la orden del día, no es como para hacer las compras con alpargatas blancas. Tiene ofertas que publica en los pizarrones que están en la vereda y sus vendedores una capacidad extraordinaria para meterle cuchillo a la sandía si querés llevar«solo un pedacito». Te miran y sin preguntar cortan justo donde querías. Envían los pedidos a domicilio sin cargo.