Necesitaba reparar un taco y termino siendo la encargada de componer todos los zapatos que tenia. La compostura de zapatos parecía ser cosa de hombre, pero no es así, encontré a esta señora que tiene un local ordenado, luminoso y pulcro(el taller no esta a la vista) Un día llegue por una bota y me quede para siempre, le deje las bota para cambiar las tapitas, me las devolvió como si hubiese ido a comprarlas de nuevo. Un poco sorprendida y desconfiada al mismo tiempo sin decir nada, me lleve el calzado para revisarlo tranquila en casa y encontrar el truco, a la semana lleve otras. Cuando volví a retirarlas, estaban tan pulcras como las anteriores, no me aguante y pregunte: me explicó que le pasaban una silicona para limpiarlas que reaviva el cuero. Me fui contenta con mi botas impecables y cada vez que algún zapato necesita unos mimos regreso aquí porque se que los trataran como se merecen. También venden productos, cepillos, cordones y plantillas. Pero el gran valor agregado es el trato que tiene, los costo no son más elevados que en otros lugares, pero el trabajo final es excelente, usan materiales nobles de buena calidad. El tiempo de entrega no supera los dos días, y te pegan un llamadito si esta antes de lo previsto. Verdaderamente un excelente lugar para recomendarle a tus zapatos.