La comida del lugar es excelente. Pedi sorrentinos de salmón con salsa de frutos de mar y estuvieron a la altura. El salón es muy lindo y la atención del personal es bueno en general. Lo único malo fue lo q se demoraron en llegar los platos en la mesa. Solo xq la comida fue excelente no lo califique con menos estrellas. La verdad desesperante esperar 45 minutos para cenar. Quiero creer q fue un accidente de una noche. La calidad de la comida invita a volver y tener una mejor experiencia.
Laura A.
Tu valoración: 5 Almagro, Buenos Aires, Argentina
¡Excelente!!! Qué placer salir tan satisfecho de todos los sentidos de un lugar. Ya conocía el Pasta Rossa de Adrogué y el de Lomas de Zamora deslumbra de igual modo. El lugar era una antigua casa restaurada y con mesitas hasta en un patio interno cubierto precioso. Está lleno de plantas y detalles amenos, y qué decirles de las pastas!!! Los platos son re grandes y llegan en mini paellitas para que se mantengan bien calientes. La carta es igual a la de Adrogué, la atención igual de buena, y por suerte también la cocina. Me encanta cuando una franquicia responde igual de bien que su casa matriz, cosa que no siempre sucede. Gran variedad de vinos y súmamente amable la atención y predisposición de parte de su personal. Impecable, divino y muy deli todo. Abstenerse de comer toda la panera, que es riquísima pero vale la pena dejar lugar para lo que viene después, incluidos los postres!
Itatí A.
Tu valoración: 2 Buenos Aires, Argentina
Fui al de Adrogué y siempre estuvo todo bien, el de Lomas deja mucho que desear. Tenian como sugerencia del día en un pizarrón «Raviolones de Berenjenas», la envoltura de los raviolones muy gruesa, poco cocida, con mucho colorante verde y el relleno con sabor a parmesano y a ricota y a NADADEBERENJENA ni por casualidad asomaban las berenjenas. Una estafa culinaria! Al manifestarle a la moza lo que sucedía no dio ningún tipo de explicación convincente más que«las berenjenas están en el relleno»(cosa que tuvo que ir a consultar tanto al presentar la sugerencia como el reclamo). Ninguna intención de preguntar si me agradaba o no, de pedir alguna disculpa, de ofrecer cambiar el plato, etc. hasta que solicitamos el libro de quejas que NO existe y recien ahí se acerca un señor a querer explicar lo inexplicable, a insistir en que eligiera otro plato del menú, para no irme sin comer nada. Sin mirar la carta, le solicito unos spaghetti simples con aceite de oliva y tomate concasé; pasados 15´ me traen spaghetti duros, poco hervidos, con 4 tomatitos cherry cortados al medio y hojas de albahaca cortadas finitas. Cuando llega la cuenta no cobraron la berenjena secreta pero si me cobraron los incomibles spaghetti frescos que yo no tenía ganas de comer ni de probar y que lo hice ante la insistencia del encargado por tratar de solucionar las cosas. Cabe aclarar que en el plato quedó más de la mitad de los spaghetti que habían servido. GENTEQUECENAENLASLOMITAS: ABSTENERSEDEPASTAROSALOMASPORFAVOR … La ambientación: bien, pero las sillas con poco relleno de espuma de goma y respaldar corto incómodas. Ahhh! y no te cuento si te toca sentarte en las que son de chapa, las del patio cerrado son aún peores, pero todo queda bonito }, blanco y pulcro. La iluminación del local: estéticamente agradable, pero funcionalmente incorrecta. O, hay que llevar una linterna para poder leer la carta?.
Elisa L.
Tu valoración: 4 Buenos Aires, Argentina
Éste es uno de los tantos lugares que se están sumando a Las Lomitas y la verdad que promete bastante. La atención es muy buena, aunque la moza está un poco perdida con la carta de vinos, más que nada de vinos, pero eso es totalmente mejorable. Esperamos muy poco para los platos y todo estaba en su punto justo. El plato tiene la comida necesaria, es decir no son para compartir y los precios son acordes.