Paseo de la victoria, una cosa mágica, mágica de verdad. Porque a pesar de no tener ninguna utilidad existe. El mismo se ubica cerca de un Starbucks cosa que de movida ya es bueno. En el centro de la ciudad. Algunos se preguntaran, para que esta entonces? Yo también me lo preguntaba, en repetidas ocasiones. Sin embargo a la noche es donde cobra su verdadera funcionalidad. Luego de que el gobierno pseudo facista de macri cercara todas las plazas, a la noche ya no se puede ranchear en ningún lado. Paseo de la victoria termina sirviendo para eso, un lugar donde uno puede sentarse a fumar y ver como los autos pasan, y la ciudad se mueve en sus infinitos contornos, haciendo juego con las sombras del sol que se va ocultando. Un lugar mágico, si podemos verlo.
Alejandra A.
Tu valoración: 2 Buenos Aires, Argentina
Aún me pregunto cuál es la razón de ser de Paseo La Victoria. No es una plaza ni es un paseo propiamente dicho. En mi imaginación es un triángulo que divide sutilmente los barrios de Almagro y Caballito. Y aunque no tenga juegos ni un frondoso césped siempre hay gente sentada en sus bancos de cemento; abuelos con sus nietos, jóvenes que se divierten intentando desplumar a las palomas(me parece terrible, pero es mejor avisarles a que el espectáculo los tome por sorpresa) y parejitas que quizás no encontraron mesa en el Starbukcs de enfrente. Es un imán que me atrae a pesar de sus pocos encantos. Mientras fui voluntaria de la ONG Caminos Solidarios visité el paseo para asistir a personas en situación de calle. Llegábamos los martes a la noche y nos esperaban hombres y mujeres que nos recibían con besos, abrazos y una alegría inconmensurable. Desde entonces le tomé un especial cariño a un lugar cuyo nombre tardé años en identificar en un cartel de acero calado. Paseo La Victoria es la sala de espera para los padres que aguardan la salida de sus hijos del colegio Sagrado Corazón y para los que hacen tiempo hasta que empiece la película del cine que está a la vuelta. A los que pasan caminando por esta esquina, presten mucha atención porque tiene un giro para los vehículos que doblan desde Avenida La Plata señalado por un semáforo que casi no se ve. Más de una vez crucé en rojo sin saberlo y conductores enojados me dedicaron bocinazos y comentarios subidos de tono(¡me dijeron de todos menos linda!).