Desastre, cucarachas, recalentado y mala atencion! No vuelvo ni que ahi regalen entradas para los Stones Tendrian que cerrarlo y abrir un blockbuster y tendrian mas ganancias
Nicolás C.
Tu valoración: 3 Buenos Aires, Argentina
Los precios no son lo que esperarías, peeeeero… hay que pagar el alquiler en Av Rivadavia. La comida estuvo muy bien, pedí lengua a la vinagreta, comida de bodegón y una soda de sifón. Me invitaron una empanada de carne y luego un café cortado. Así y todo, gasté $ 120. Por lo que vi las porciones son bastante generosas y se puede compartir. Le daría una chance más pidiendo otra cosa, pero no es un lugar al que iría exclusivamente.
Eliana W.
Tu valoración: 1 Buenos Aires, Argentina
Disculpen todos los fanáticos, supongo que tendré que probar una minuta para estar de acuerdo. No pidan tostado mixto… además de que tardó 25 minutos, está hecho con esa pasta rosa prensado. Es algo que se está utilizando cada vez más y me angustia. ¿Por qué ya casi no hay jamón en Argentina? Tristeza profunda. El café zafa.
Guillermo B.
Tu valoración: 4 Buenos Aires, Argentina
Las porciones son muy abundantes y tienen una gran variedad de platos. Si vas a tomar una cerveza nada más, te traen papas fritas(las de verdad, no de bolsa). Es el lugar ideal para ir de a dos en plan de compartir.
Diego S.
Tu valoración: 4 Buenos Aires, Argentina
Qué sería de la vida si no existiesen esos lugares que uno no sabía que existían hasta que pasamos por la puerta con el estómago haciéndote kung-fu por adentro, demandándote que te claves una mila napo gigante con fritas, una ballena bebé, o algo similar en su peso? Eso mismo me pasaba cuando caminaba por Rivadavia y Medrano, y justo dí con la puerta, el aroma a comidita casera y el local llenándose de a poco ahí en Los Orientales. Al entrar casi me desnuco con una fuente de fritas y unas supremas a la napolitana, que por su tamaño, estoy convencido de que no son de pollo sino de avestrúz o algún animal que de a poco está quedando en extinción: qué mejor recibimiento que este? Decime, dale. Será por eso que yo también pedí lo mismo. Influenciable yo? Ni en pedo, te re parece: Porción enorme, no la terminé. Me pedí un cafecito con crema después, para bajar. Y te soy honesto, no le tenía fe, pero la verdad es bastaannte aceptable. Tanto el lugar, como los precios son acordes a lo que ofrece el local: comida rica y abundante, fiel al estilo bodegón. Laburan con pedidos para llevar, asi que el tiempo de salida de los platos se estira un poco: la paciencia, como siempre, es la mejor aliada para estos casos. La atención es correcta, ningún error ni faltante en el pedido, y te envuelven todo lo que sobre para llevar también. Hay mesas grandes, por lo que podés caer con la barra a comer después del picado y listo, todos ganan. las calorías que perdieron corriendo la bocha. Eso sí, las mesas están muy pegaditas: asi que nada de estirarse mucho eh, que acá atrás estamos comiendo, y hablen más bajo que se escucha todo. Los precios no son un regalo, pero no es para nada caro. Es un claro«sí, se vuelve», sobre todo porque en otras reseñas se elogiaron mucho las pastas, y si hay algo que amamos casi tanto como al fútbol y a mamá, son las pastas.
Sol A.
Tu valoración: 4 Buenos Aires, Argentina
Sirve para comer rico, es un lugar al que si ves desde afuera sin saber lo rico que se come, no entras. Las porciones super generosas. Las mesas muy juntas, el lugar chiquito, atención buena pero tosca. Un lugar nada pretencioso que te saca de apuro cuando no tenes ganas de cocinar pero queres comer casero.
Ariana A.
Tu valoración: 4 Buenos Aires, Argentina
A medio camino entre bodegón y pizzeria, este restaurant es un clásico pero no tiene ninguna pretensión. Comida abundante, muy rica y buenos precios en un estilo simple y sin vueltas. La pizarra en la puerta tiene todos los días una lista de platos sugeridos, siempre clásicos que salen enormes. Hay que dejarse sugerir, aunque es mejor esquivar las pizzas, están bien, pero no es lo mejor del lugar. Todos los platos con carne y guarnición son muy sabrosos, pero las pastas caseras son imperdibles. Otra genialidad de Los Orientales es que la gaseosa es grande, de 2 litros y muuy barata comparada con la equivalente suma de pequeñitas en otro local. La atención es tosca, la presentación desprolija, y la comida suele tardar, pero todo esto es parte del estilo y la forma de ser del restaurant. No buscan aparentar nada, solo te sirven comida rica. Un montón.