excelente lugar para disfrutar de una buena carne asada, sea el corte que sea. en mi caso pedi un sandwich de vacio que no aparecia en la carta pero se lo pedimos al mozo y nos dijo que si, que habia, a un muy buen precio y acompañado de unas papas caseras muy ricas. Muy recomendable, ambiente familiar y buena atencion
Jimena G.
Tu valoración: 3 Buenos Aires, Argentina
Como lo dice su nombre es una parrilla al paso bien tradicional. Está justo pegada a la parada de colectivos, entonces mientras esperas el 141, que ya viene atestado de gente, oles ese maravilloso aroma a carne cocida a las brasas(Gracias querida reacción de Maillard por esto y muchas cosas más: ejemplo pan recién cocido). Tiene precios módicos y en general todo lo que ofrecen es muy rico. Las papas fritas son muy buenas y el clásico sanguche de bondiola cumple lo que promete. Tiene un par de mesas y una barra para comer ahí, pero si estas más de diez minutos adentro, el olor a papa frita te acompañará por toooooooda tu vida. Además es un lugar donde la concurrencia es 99.9% masculina, entonces te sentís un poco mucho observada mientras estas esperando tu sanguchito. Prefiero pedir y esperar afuera, además me evito encontrarme con gente conocida. Que horror cuando estas hincando el diente al choripan y alguien te viene a saludar. Tienen de promo sanguche de bondiola + porción de papas + vaso de gaseosa por $ 65 Muy bueno para comer un poco de proteína en los mediodías de la semana laboral
Manuel S.
Tu valoración: 4 Buenos Aires, Argentina
Buenos Aires es una ciudad con un ritmo de vida que muchas veces obliga a comer«al paso»: algo rápido y que permita seguir con las actividades de forma práctica y a mano. En estos casos, la solución más lógica puede llegar a ser un sandwich en algún kiosko o estación de servicio. Pero la verdad que no siempre lo más lógico es lo mejor. Viviendo en una ciudad que se caracteriza por sus parrillas, las opciones para un sándwich de vacío, una bondiola o un choripan, no están tan a mano, excepto los carritos de la costanera o la zona del Planetario. En Sacalabrini Ortiz y Loyola, a la vuelta de la zona de los outlets, está Julio. Una parrilla al paso que ofrece buena calidad a un precio razonable. El local es chico, tiene algunas mesas en las que te podés sentar pero lo que yo recomiendo es ubicarse en la ventana, en alguna de las banquetas en la vereda. Las opciones de sándwich son las clásicas: vacío, bondiola y choripán y también hay hamburguesas, pollo y milanesa. A la hora de pedir un plato, si lo tuyo no es el sandwich, se agregan al menú la tira de asado y la entraña, aunque también hay que admitir que los cortes pueden variar de acuerdo al ánimo del parrillero, Julio, que desde la barra maneja el local y saluda y habla con los vecinos sin dejar de atender el fuego. Los precios van desde los 30 hasta los 150 pesos(la parrillada para 2, completa como debe ser con asado, pechito de cerdo, bondiola, vacío, riñones, chinchulines, chorizo y morcilla). Julio está abierto desde el mediodía hasta la medianoche, no trabaja tarjetas de crédito y si sos de la zona también tienen delivery.