Hotel Madero

El personal del hotel es profesional, a penas entras hay alguien atendiendote, o con ganas de ayudar.
Tuve la oportunidad de ir un par de veces (una el año pasado), fui a comer un «snack» aprovechando que habian venido de visita unos amigos.
Me pedi un sandwich de cordero y un zumo de pomelo. El sandwich estaba bien, pero le faltaba algo quizas la carne estaba demasiado cocida, pero no fue un error que destaco.
Y por otra parte recomiendo el spa, el Masaje que me hicieron fue un «californiano», este dura 50 minutos y tiene un costo de 700 pesos (comienzos del 2016), si bien es un precio alto, la calidad del servicio es buena, y no tiene nada que envidiar a otros spas.
Da ganas de volver!

Great location! East side of the river, walking distance to plaza de mayo and many other sight seeing spots. Room were nice and clean. Got upgraded to a suite. Fresh flowers everyday. Complimentary bottle water and champagne. Friendly staff who helped book restaurants.

Variedad para desayunar, calidad y sumale buena atención! Con buena compañía es el lugar ideal para una buena tarde de spa. El bar es muy tranqui, es preferible ir a uno de la zona.

Nos alojamos con mi novio por nuestro aniversario/​San Valentín y me pareció excelente.
Compramos un paquete que ofrecía estadía, con cena en Red, desayuno y spa. Estaba a un precio razonable por las cosas que ofrecían. Caro, pero dentro de lo esperado.
Desde que llegamos fue todo genial, nos recibieron y llevaron la valija a la habitación mientras terminabamos de hacer el check in. Cuando subimos la habitación era lindísima, no era como la que mostraban en la página, sino mejor. La cama era lo más cómodo del mundo, y tenía un balcón enorme a la calle con reposeras y plantas.
Al toque nos pusimos las batas y nos fuimos al spa. Lo primero que vimos al entrar fue el sky bar, pero estaba cerrado porque iba a haber un evento o no sé. La pileta climatizada estaba buena, mucho olor a cloro en el ambiente y medio abombado, como todas las piletas climatizadas. No les recomiendo salir al balcón después de meterse porque la diferencia de temperatura y el viento hacen que te cagues bien de frío. Después nos echamos a tomar sol del otro lado del spa, donde hay varias reposeras y un hidromasaje como para 14 personas. Bastante piola.
A la noche fuimos a cenar a Red. Yo me pedí una codorniz rellena con espinacas y cosas deliciosas, y Martín un cordero con nosequé que estaba increíble. De postre pedimos un coso de chocolate blanco que era rico, pero tenía como una gelatina muy extraña que no me gustó.
Después de la cena fuimos al White Bar a tomar alguito antes de salir. Los tragos son muy buenos, y los bartenders son súper piolas, estuvimos charlando un rato y nos contaron sobre cómo aprendieron el oficio y buenos bares para ir a tomar (y aprender).
Toda la experiencia fue de lo más placentera, súper recomendable.

Amazing!!! This was such a lovely hotel to stay in. The rooms are great– large bathrooms, very comfortable beds. The staff is multilingual, which was amazing for my traveling partner and I (unfortunately our spanish is NOT as good we thought). Everyone was super helpful. The lounge is tasteful. The outside seating area is comfortable.
It was certainly expensive, but I think well worth it. Lovely location. The gym isn’t enormous but it’s got everything you need. The outdoor sun deck is lovely. You don’t feel as though you are in the middle of Buenos Aires. The pool is nice. It’s great that its indoors.

Great location. Friendly and attentive staff. Nice and clean facility — bar, lobby, pool, etc. I don’t know, I didn’t explore that much, but what I did see was top notch.
It’s close to my work here and an easy walk to some of the cooler parts of Buenos Aires — like the Presidential Palace, Madero eateries, Defensa antiques area, Florida strip (if you’re into that) and the ocean park (running, walking, etc.). It’s a 10 – 15 minute taxi ride to Palermo.
I’ll stay here again. Price competitive for the area at around $ 300/​night all in and massively better than the Hilton.

Me tocó ir al Madero por varios eventos y reuniones de trabajo. Es un hotel cinco estrellas pero casi que te olvidás de que cada detalle está siendo controlado por alguien. El ambiente es súper amable, cálido y relajado, en gran parte logrado por la atención del personal, que es excelente. Inauguró en 2004.
La decoración interior es austera, sin grandilocuencias ni colores/​estampados pomposos. Ganan las líneas rectas, la madera oscura y los pisos impecables. En los ambientes hay obras de arte que les da un toque único a cada uno.
En la planta baja funciona un bar (es todo riquísimo, recomiendo pedir el té de la tarde para compartir) y también el restaurant Rëd, que no sólo es para huéspedes sino abierto al público (ahí organizan cenas y eventos para fechas especiales como el Día de la Mujer, Pascuas, Día de la Madre/​Padre, Navidad, Fin de año). La cocina de Steven Jung, el chef ejecutivo, es superlativa.
En la parte trasera de la planta baja está el espacio que más me gusta, el jardín. Está hecho todo en madera, estilo decks, con árboles y plantas que crean una atmósfera ideal. Detrás de una ligustrina está la pileta. Si el clima está lindo, es ideal para sentarse a tomar un café y leer ahí. Las habitaciones son cómodas, con todo lo necesario para sentirse a gusto pero, otra vez, sin excesos. Tienen vistas atractivas: algunas dan a la reserva ecológica y el Río de la Plata, otras a Puerto Madero e incluso el centro porteño.

De todos los hoteles que conozco de Puerto Madero este creo que es el que más me gusta. Tiene la particularidad que, más allá de ser bien lujoso, es fino, delicado y minimalista, no como el resto que suelen estar super cargados y llenos de cosas super sofisticadas. Los cuartos son bien grandes, casi todos con balcón (desde donde se ve el río o la Reserva Ecológica) y están muy bien ambientados, al estilo hogar, de hecho el lema de ellos es «sentite como en tu casa» (ojalá mi casa fuese así).
Entre los servicios más destacados del hotel están el spa, que te deja como nueva y tiene una vista hermosa a la ciudad); la pileta climatizada y el restaurant, que está en una especie de jardín interior techado con vidrio, por donde pasa el sol y es hermoso para desayunar y arrancar el día de la mejor manera.
Obviamente, los precios son un poco elevados (a razón de 100U$S por persona) pero en comparación con los otros hoteles de la zona es el más barato y, sin dudas, es dinero bien gastado.