Green Eat

Pasé a comprar un wok y compré el de pollo, soy fanática del de camarones pero en la oficina no puedo comerlo, así que opté por el de pollo que no lo había probado.
Por suerte tenía en el escritorio un sobrecito de salsa de soja, porque compramos 2 iguales y no tenían gusto a nada.
Una lástima que dejaron de hacer una bandejita que era comida tipo mexicana, y que no habíà la key lime pie, que es gloriosa!
Es un lugar caro, lindo estéticamente, hay opciones que sobresalen y otras que pienso que son un robo, como el caso del wok de pollo, le pongo 3 estrellas porque soy clienta frecuente, sino iría una por mi experiencia del día.
Lo bueno es que aceptan tarjeta, hoy había 20% de descuento con Citi.
Lo malo y muy malo de todos los locales es que siempre hay mucha cola y la comida se enfría!!! Es una fiaca pagar y tener que pedir que te calienten la comida para el local, deberían mejorar esa parte del proceso.

Compro ensaladas al menos una o dos veces por semana y vengo notando que la cesar viene menos abundante que al inicio. Asimismo noté en varias oportunidades que la lechuga deja paso a abundante rúcula. Muchachos si quiero ensalada de rúcula compro eso. Cuando compro una cesar y pago lo que ustedes cobran pretendo que venga llena de lechuga y sin «polizones». Con el pollo pasa algo similar. Inicialmente esta ensalada sorprendía con un pollo sabroso y bien sazonado. Ya van varias veces que hay que evitar llevarse una ensalada con «requechitos deshilachados» de pechuga. Sugerencia: ponerse las pilas y no dormirse en los laureles que sigo dándoles oportunidades.

Excelente el sándwich de tomate, rucula, palta, cebollas moradas caramelizada con jugo de frambuesas y de postre un piie de limón. Almuerzo sano y muuuy fresco

Cada vez menos estrellitas este lugar. ¿Qué está pasando?
Cosas que veo desmejoradas:
— Las ensaladas están más chicas. Entiendo que es para no subir mucho el precio (se nota mucho en la César)
— Se descuidan mucho más los platos: el sushi se desarma, por ejemplo.
Cosas que me pasaron hoy y que, aunque no son imperdonables, fueron como la prueba de que realmente los está saturando la cantidad de gente y sólo mejoran la fachada pero no hacen un cambio profundo:
–Todavía no tienen ninguna opción para celíacos. No digo «que no tenga tacc» digo, apta celíacos.
— Me compré una hamburguesa de portobellos. El pan estaba descongelado recién y encima ultra tostado. Duro. Horrible.
Y acá la estrella del fiasco :
CONOCÍ LOS BAÑOS.
Explicame cómo si abrís muchos locales porque te está yendo bien, en un local donde pueden entrar fácil ⁵⁰⁄₆₀ personas sentadas tenés 1 BAÑO por piso con un solo cubículo cada uno. Es diminuto, estaba sucio, mal iluminado y tenía roto (salido) el contenedor de papel higiénico.
A ver, si bien no tuvieron drama para cambiarme la hamburguesa y siempre me atendieron bien en general… Me parece que los dueños se están abusando del «hazte la fama…»
Ojalá no pierdan clientes, la comida es realmente sabrosa. No pierdan lo que los destaca porque el valor en el que ponen sus alimentos, implica que no sólo la materia prima se destaque… sino el lugar, la presentación y la atención.
Vuelvo a repetirlo: Hagan opciones aptas celíacos. Media pila.

Es un lugar ideal si queres comer comida sana y rica, tenes variedad y confianza de que lo que pruebes va a ser fresco y rico. El unico tema es que esta sucursal siempre esta super llena y tenes que hacer mucha fila en la caja, eso resulta desalentador si contas con poco tiempo para almorzar, pero vale la pena la espera.

Esta sucursal de Green Eat es la más poblada que conocí. Tiene sentido por estar en Tribunales y porque el local es mas pequeño que el que suele frecuentar en Pueyrredón y Sta. Fé.
Entrar y ver la larga fila de personas esperando pagar suele asustar, pero hay tres cajeros y la mayoría de las personas piden para llevar. Así que tranquilos que te cobran rápido y siempre conseguís lugar.
El menú es el de todas las sucursales, y debo decir que la calidad y sabor es fiel en todos los locales.
No puedo evitar llevar Sushi con ensaladita, queda tan bien esa combinación, y el aderezo que viene para condimentar la ensalada (limón, sal y aceite bien fundido) va perfecto.
La chocotorta es muy rica si antojan algo dulce, y recomiendo llevar las barras de cereales, carísimas pero caserísimas y riquísimas.
También venden otros productos que no son para el almuerzo o cena, como dulces, panes, cereal fraccionado, chocolate.
Vale la pena todo en Green Eat.

Es una buena opción para comer algo rico y sano si trabajas por la zona pero me parece demasiado caro. Hay que rogar que haya lugar, siempre se llena a la hora del almuerzo.

Este lugar está bien para comer ahí si conseguís mesa. Generalmente hay mucha gente en el local en la hora de almuerzo en Tribunales con lo cual se complica un poco.
Para llevar en cambio los precios son bastante altos, por menos plata conseguís comidas iguales en metros a la redonda.
Pedí una ensalada cesar y era bastante abundante aunque por ahí tenía demasiado pan. También una entradita que estaba bastante bien, una mayonesa con verduras recomendable.
La atención sí es muy buena, hay gente atenta a lo que pasa en las mesas y que atiende con una sonrisa. Raro en Baires.

Siempre tengo mis dudas con este lugar, por sus precios. Digamos es el concepto de fast food de comida sana y rica, muy bien logrado.
Hacen mucho énfasis en sus productos orgánicos, sin conservantes, naturales y frescos. Todo su packaging cuenta con inscripciones y frases graciosas que te invitan a comer o probar el producto, con la descripción de los que son y traen, volviéndose algo muy simpático.
Tienen ensaladas, cada una con su aderezo, sándwich en pan tipo lactal y bague tes, wraps & rolls, sushi y woks.
La ensalada ceasar, el bagel de salmón y el sándwich de vegetales grillados son los que mas me gustan
La realidad es que creo que logran propuestas muy sabrosas y originales.
Si pienso que el costo es demasiado elevado para ser un lugar donde es autoservice.
Una ensalada + una lata de coca: puede rondar los $ 80/​$ 90.

Me encanta pasar por esta esquina de Tribunales y llevarme alguno de sus sabrosos sandwichs de panes caseros y productos orgánicos. Esta es otra de las opciones ricas y saludables que son tendencia en nuestra ciudad. Todo lo que venden está realizado sin conservantes, i saborizantes o productos químicos.
En Green Eat podés sentarte a almorzar o llevarte la comida a tu trabajo. Por suerte, si bien se junta mucha gente en el horario pico, la atención es rápida. Además de los wraps, también son una buena elección las ensaladas. Para la hora del té hay yogurt, muffins y bagels. Tenés que probar sí o sí el licuado de kiwi, frutilla y mandarina. Super refrescante para estos días de calor.
Además, tienen un pequeño almacén donde venden productos orgánicos como mermeladas, miel, granola, aderezos, panes y cookies.
El lugar está muy lindo ambientado, muchas veces decoran con flores y es alegre.

Green Eat es el lugar ideal si estás por la zona y no querés que tu almuerzo termine en un McDonald porque es rápido y relativamente barato.
Aparentemente la gente que trabaja por la zona también piensa así porque en hora pico se los ve haciendo la cola y llevándose su comida al trabajo.
La propuesta es fácil: rico, sano, orgánico, no es caro y tiene variedad.
A veces comer rico significa caer en las típicas ensaladas. Para Green Eat no es así. Hay wraps, sushi, sándwiches naturistas, etc.
Aunque debo admitir que las ensaladas son buenísimas y en este lugar vale la pena el cliché de ensalada como almuerzo saludable.
Es una buenísima opción para los vegetarianos porque tienen una carta veggie bastante amplia.
Los jugos son riquísimos, hay que probarlos. Súper naturales y bien refrescantes.
Los productos son súper frescos.
Tiene una decoración amable y potencia su estilo green-​orgánico.
Muy buena opción, si ando por la zona, definitivamente voy a volver!