Centro Terapéutico Dr. Máximo Ravenna

«Corte, medida y distancia» esas son las palabras que más vas a escuchar en el Centro Terapéutico de Máximo Ravenna.
Esta clínica para trastornos de la alimentación, especializada en el descenso de peso, es excelente. Todo su equipo profesional trabaja en pos de que el paciente solucione su problema con la comida basado en un método que realmente funciona. Corte con la comida, medida en la porción y distancia entre comidas. Esa es la clave para bajar los kilos que necesites.
El lugar es enorme, tiene dos edificios enfrentados y hace poco inaguraron un gimnasio super completo. Es un espacio moderno, bien amoblado y con baños limpios y espacios con balanzas de última tecnología para controlarte.
Se puede hacer una visita de primera vez y que te vea un psicólogo y un nutricionista. Y después evaluar si querés comenzar el tratamiento o no. Una vez cumplido tu descenso de peso pasás al mantenimiento. Y de a poquito dejás de visitar la clínica, pero para ese punto ya la vas a sentir parte de tu familia y no la vas a querer abandonar.
En la planta baja funciona el bar Nutra, donde se puede desayunar, almorzar o cenar las viandas. También encargar para llevar.
Es bastante caro, pero vale la pena y te vas a sentir super acompañado porque es un equipo que trabaja de manera interdisciplinaria para brindarte un tratamiento completo y eficaz.

Máximo Ravenna me cambió la vida!
Desde chico sufrí de sobrepeso y después de varios intentos con nutricionistas particulares y otros centros de adelgazamiento, obviamente sin éxito, llegué a Ravenna.
El primer día que entras se cumple el primer requisito para hacer la dieta: CORTE. Cortar con la comida en exceso, y solo comer lo que dice tu nutricionista, sumado a unos cuantos litros de agua.
La mística de este lugar está en la contención grupal que se recibe ya que dos o tres veces por semana se debe asistir (obligatoriamente) a las charlas con «compañeros de ruta» como prefieren llamarlos los profesionales.
Durante todo el procedimiento tanto de descenso de peso como el de mantenimiento, uno está acompañado no sólo por nutricionistas sino por médicos profesionales, psicólogos, deportólogos, cocineros de primera línea que respetan 100% la dieta (las famosas viandas de Ravenna), y otros profesionales.
Las viandas son una realidad, pero también puede prepararse uno mismo su comida.
Las pocas calorías también son una realidad (un almuerzo típico tiene 150 – 200 kcal), pero es la única manera de bajar tantos kilos en tan poco tiempo.
El mantenimiento también es una realidad pero hasta ese momento uno ya llega súper entrenado con respecto a la alimentación y no es algo imposible de lograr.
Todo el tiempo te sentís acompañado y semana a semana (como toda dieta resultadista) notas que perdiste 1 o 2 kilos y esto te carga de energías para seguir adelante.
Es bastante caro (con viandas incluidas mucho más caro) pero juro que es la plata que mejor invertí en toda mi vida.
No dudaría ni un instante si necesitaría volver a bajar de peso en ir a Ravenna; y no paro de recomendárselo a todo el mundo.
Vale la pena intentar, no sólo te cambia la manera de alimentarte sino todo tu estilo de vida.