Este pequeño café está a ½ cuadra de mi casa, casi enfrentado a Havanna, fui porque voy seguido a Havanna y quería cambiar un poco, es chiquito, tiene afuera unas mesitas y adentro no mas de 8 mesitas individuales, lo que hace que el lugar sea bastante tranquilo. Hay variedad de cositas, tanto de cafetería como sándwiches, tartas, licuados, smothies, ensaladas, y las clásicas golosinas de bonafide las cuales suelen tener promociones. Lo que mas me gusto del lugar en principio es que pese a ser chiquito, es un ambiente súper tranquilo, sin mucho ruido, lo 2do es que la buena onda que tienen los dueños y los empleados hace que te sientas como en casa. Desde la entrada ya te saludan con una gran sonrisa y muy buena onda, y la atención es así, muy amable y sin malas caras, al ser chiquito están muy pendientes de cualquier gesto que puedas hacer para pedir algo. Así que creo que pasara a ser mi café de barrio de preferencia. Lo único malo es que el wi fi nunca me engancho, y la señal del celu no me enganchaba bien, pero bueno si vas con alguien no necesitas el celu, si vas sola como yo, es medio embole no tener el celu operativo. jajja pero salvando eso, el lugar es ideal para un café de despeje de tardecita…